Ahorrar en calefacción: ¿es mejor apagarla o dejarla al mínimo?

Este truco te ayudará a salvar unos euros de tu factura

La mayoría del consumo de gas en casa lo tenemos en invierno. Nos cuesta más calentar el agua y, sobre todo, lo que hace que la factura sea más alta es el uso de la calefacción, siempre y cuando depende de ti su puesta en marcha o su desactivación.

Ahora bien, hay una duda que suele ser recurrente en millones de hogares españoles y es qué es mejor para evitar sustos en la factura, si apagar la calefacción por completo o dejarla a una temperatura tan baja que realmente no se encienda o lo haga muy poco.

Las temperaturas recomendadas

Como casi todo en esta vida, la respuesta es "depende". Hay varios factores que influyen en esta decisión, como el grado de frío o de calor de la zona en la que vivas (no es lo mismo Zaragoza o Teruel que Sevilla o Málaga, por ejemplo) o de lo que tus ventanas y tu casa sean capaces de aislarte del frío.

De todos modos, sea como fuere, por la noche una temperatura recomendada en casa es de alrededor de 16 grados. Aun así, aunque se puede dejar a esa temperatura a modo de mantenimiento, lo mejor es apagarla y encenderla en cuanto te levantes.

La diferencia no va a ser sustancial en cuanto a frío, pero lo que sí que puede sustancial es la factura, ya que cada grado eleva un 7% el consumo.

Luego ya durante el día, cuando hay actividad en casa, con una temperatura de unos 20 grados debería ser suficiente, aunque es verdad que para mitigar los efectos de la crisis energética por la guerra en Ucrania el Gobierno de España recomienda que se deje a 19 grados como máximo.

También, si quieres maximizar el ahorro en la factura puedes poner en práctica otros trucos que te contamos como aislar la casa o purgar los radiadores.