Mercadona desvela la fórmula para preparar el mágico jabón Beltrán

El jabón Beltrán es uno de esos productos que se utilizan para quitar las manchas más difíciles. Un jabón que ya se usaba en la época de nuestras abuelas y que hoy en día sigue siendo uno de los favoritos para poder deshacernos de manchas en casi cualquier cosa.

Las tareas del hogar suelen ser siempre más fáciles de realizar con este jabón. Normalmente, este producto elaborado con aceites vegetales de origen natural se usa para quitar las manchas en las prendas de ropa, ya que respeta los tejidos. Por ello, muchas personas lo eligen para manchas más difíciles, como las que suele tener la ropa de los bebés y los niños.

Pero este no es el único uso que le podemos dar al jabón Beltrán. Otro de los usos más comunes es el de limpiar la campana de la cocina, el microondas o el horno, donde suele quedarse la suciedad más complicada de quitar. Este producto es tan potente que es capaz de eliminar por completo estas manchas.

Usos que quizás no conocías

Aunque estos son los usos más comunes, hay otros que suelen pasar inadvertidos y solo unos pequeños afortunados conocían hasta ahora. Al no llevar colorantes ni perfumes, este jabón es muy potente y eficaz para limpiar los discos de algodón reutilizables o las esponjas de maquillaje. También otros utensilios de cocina como sartenes y ollas que tengan la base quemada o ennegrecida.

Este jabón puede comprarse en Mercadona en botes de 500 gramos a un precio de dos euros por unidad.

Cómo preparar el jabón en casa

Además de comprarlo en supermercados, también puedes dejarlo preparado para su uso. Este jabón viene en un tarro y tiene una textura bastante densa, por lo que se puede dejar preparado en distintos formatos si lo vas a usar de forma habitual. De esta forma lograrás acabar con la suciedad más rápidamente y ahorrar tiempo.

Lo primero que debes hacer es poner un cazo con 300 ml de agua a hervir durante 10 minutos. Luego tendrás que añadir dos cucharadas de jabón Beltrán y removerlo hasta que quede todo disuelto. A continuación, déjalo enfriar.

Ahora deberás preparar unos cuantos botes. Puede ser un desodorante de bola y aplicar la mezcla como si estuvieses aplicando desodorante. También la puedes meter en un vaporizador, con el que podrás llegar a lugares menos accesibles, como la campana de cocina o el horno. Puedes usarlo con agua para fregar el suelo o guardarlo para las próximas semanas.