La razón por la que los supermercados colocan las pilas en las cajas y que aumentan sus ventas

Están colocadas junto a otros productos infantiles, chicles, galletas o chocolates

Nada es casualidad en un supermercado. Como bien es sabido, las cadenas utilizan técnicas y trucos que inciten a los usuarios a consumir más, a acelerar sus compras o a hacerse con determinados productos cuya venta sea prioritaria. La colocación de los productos y secciones responde a motivos psicológicos con los que los supermercados consiguen que piques y compres lo que ellos desean.

Los supermercados se han convertido en lugares de visita obligada. A ellos acudimos semanalmente o, incluso, cada dos o tres días para hacer acopio de comida, productos de higiene personal o pequeños productos que sean de utilidad en el día a día. Uno de estos productos son las pilas.

Estas se encuentran habitualmente en las cajas, por lo que el consumidor se encuentra con ellas justo antes de finalizar su compra y realizar el pago. Y no es casualidad. Su ubicación corresponde a una técnica psicológica que no es tan conocida por los usuarios como otras.

El truco de las pilas en las cajas de los supermercados

Llega el momento de terminar la compra y pagarla. El consumidor suele dirigirse directo hacia la zona de las cajas con su cesta. Aunque en su carro quepa algo más, en su mente existe la sensación de haber terminado con la compra. Sin embargo, el objetivo de los supermercados es generar una necesidad en el último momento.

Las pilas son uno de los productos que más aparecen en las cajas. Casi nadie las ha incluido anteriormente en la lista de la compra, pero son susceptibles de acabar en el carro o en la cesta por si nos hicieran falta en algún momento de nuestras vidas. Normalmente, se encuentran junto a alimentos baratos y que pueden ser consumidos en casi cualquier momento, como chicles, galletas o chocolates. También productos para los niños que, una vez lleguen, pidan a sus padres que se los compren.

Otros trucos que utilizan los supermercados

El truco de las pilas no es el único que utilizan los supermercados. A continuación, te mostramos algunas técnicas que se utilizan en estas superficies para aumentar el consumo de los clientes.

  • Colocar el pasillo de las frutas y las verduras al final para que sea lo último que se compre y no se estropeen los productos frescos.
  • Las marcas propias de los supermercados prevalecen sobre el resto y suelen estar mejor colocadas en los estantes.
  • Los productos básicos se encuentran al final, ya que para acceder a ellos tendrás que pasar por gran parte de la tienda viendo productos que puedan resultarte interesantes.
  • La sección más iluminada suele ser la de perfumería y cosmética, donde están los productos más caros.
  • La música varía su ritmo dependiendo de si al supermercado le interesa que los clientes hagan sus compras más rápido o más despacio.