Echar gasolina a nuestro vehículo es una tarea común en la vida diaria, una rutina que muchas personas realizan regularmente para mantener nuestros automóviles en movimiento.
Aunque puede parecer una actividad sencilla y rutinaria, el proceso de repostar combustible no solo implica llenar el tanque, sino que también conlleva aspectos importantes relacionados con la seguridad, la eficiencia y, en última instancia, el rendimiento del vehículo.
Desde la elección de la estación de servicio hasta la atención a detalles como el tipo de gasolina y la cantidad adecuada, esta práctica cotidiana contribuye significativamente al funcionamiento óptimo de nuestro medio de transporte.
Las personas suelen conocer al dedillo todos los detalles de su vehículo. Algunos de ellos son vitales a la hora de repostar como por ejemplo en qué lado se encuentra el depósito para poder aparcar correctamente en la gasolinera e insertar la manguera.
Sin embargo, cada vez está más de moda alquilar un coche para irte de vacaciones o incluso para tu propia rutina ya que no tienes presupuesto suficiente para tener uno en propiedad. En estos casos no sueles fijarte en que lado está el depósito de combustible y puedes acudir a una estación de servicio, estacionar del lado que no debes y tener que hacer una maniobra para echar gasolina.
Las marcas lo indican
Para saber en qué lado correcto debes colocar tu coche para acertar con el surtidos existen varios trucos que se han hecho virales en las últimas horas. El primero tiene que ver con ser un friki de los automóviles y estar al tanto de la actualidad de los vehículos. Y es que dependiendo de cada modelo y cada marca, el surtidor siempre estará a un lado o a otro. Por ejemplo, si alguilas un BMW debes saber que estará en el lado del copiloto. Por norma general, las firmas asiáticas lo colocan a la izquierda y las alemanas a la derecha.
Sin tener que mirar el exterior del vehículo, en el interior existe un pequeño símbolo que dictamina el lado en el que encontrarás el surtidos. Todos los coches tienen un cuadro de instrumentos que indica cuanta gasolina tienes todavía en el depósito para cuando debes acudir a una estación de servicio a repostar. Justo allí se encuentra, en algunos modelos, un pequeño triángulo que, según su posición, indica donde está situado el depósito. De esta forma, será imposible que aparques de forma incorrecta para echar gasolina.