Desde que, el año pasado, Kristen Stewart le engañó con otro, ni más ni menos que Rupert Sanders, el director de Blancanieves y la leyenda del cazador, la vida sentimental del vampiro Robert Pattinson está siendo más a menudo noticia que sus proyectos artísticos, que no son pocos. Que si se refugió en el rancho californiano de su amiga Reese Whiterspoon, con la que compartió escenas amorosas en Agua para elefantes; que si perdonó a Stewart y volvieron a convivir en la mansión de Los Ángeles que compartían; que si luego la cosa no fue igual y acabaron vendiendo la casa, una mansión de estilo colonial de 4.000 metros cuadrado situada en el vecindario de Los Feliz en Los Ángeles...

El último que si es que le ha hincado el diente a Dylan Frances Penn, la hija modelo de Sean Penn y Robin Wright. Rubia, ojos azules, alta (1,73 metros), 22 años (el actor tiene 27)... Ha salido más a la madre que al padre, que ha transmitido sus genes estéticos a Hopper, el otro hijo que tuvo con la actriz en 1993.

Dylan no ha sido carne de la prensa rosa. Y eso es mérito de su madre. "No quiero criar a mis hijos en esta extraña sociedad aduladora", dijo en su día para justificar que creciera en el condado de Marin, al norte de San Francisco, y no en Los Ángeles. De ahí que haya poca información sobre la chica. Protagonizó la portada de la revista Fantastics en mayo y tiene abierta una entrada con su nombre en imdb.com, la base de datos del cine mundial, pero está vacía. Quizá le comiencen a salir proyectos tras su estelar aparición en la gala de los Emmy, el pasado fin de semana, cuando acompañó a mamá, nominada a un premio. Su vestido rojo causó sensación (en la silueta).

Aunque se comenzará a saber algo más de ella si afianza su relación con Pattinson. No la oculta. Imposible si van al The Viper Room de Los Ángeles, uno de los sitios donde ver y ser visto. Acudieron al concierto del rapero Mickey Avalon, amigo de Sean Penn. "Llevan saliendo un mes o dos", confirmó a la revista People una fuente cercana a la pareja, que asegura que el intérprete "está loco por ella".

Según Entertainmentwise.com, en el club se dedicaron miradas y caricias. "Coquetearon mucho. Había mucho nivel de comodidad", reveló un testigo. La velada siguió en el Chateau Marmont Hotel, lugar preferido por las estrellas para retozar entre sábanas. Pero solo fueron a cenar. De ahí, a casa de Pattinson. No salieron de ahí hasta el día siguiente.

La meca del cine no deja de ser un mundo pequeño y cerrado. Stewart había sido dirigida por Sean Penn en Hacia rutas salvajes, en la que interpretaba un papel secundario. Así que no es descartable que conozca a la nueva novia de su ex, con el que rompió en mayo pasado tras cuatro años.

Dylan no es la única joven con ADN de famoso que se ha liado con el vampiro de Crepúsculo. En julio se le relacionó con Riley Keough, nieta de Elvis Presley, de 24 años, y es modelo y actriz.