Era una pareja ejemplar del papel 'couché' y su ruptura tras 24 años de matrimonio y dos hijas en común, dejó boqueabiertos a muchos. Sin embargo, según fuentes cercanas a la familia, Paloma Cuevas y Enrique Ponce atravesaban una crisis desde hacía tiempo y tras meditarlo decidieron separarse y anunciarlo a través de un comunicado conjunto.

En este daban a entender que la separación se había llevado a cabo de forma consensuada y afirmaban que nada podría acabar "con el cariño y el respeto que nos profesamos el uno por el otro".

Sin embargo, el torero no ha perdido el tiempo. Conoció hace unos meses en Instagram a Ana Soria, la joven estudiante, de 22 años, de la que hace unos días confesó estar muy enamorado.

Desde entonces, su sonado romance ha cogido carrerilla y la pareja ya no se esconde. Tanto es así que hace unos días ambos publicaron su primera foto juntos.

De momento, se desconoce cuál ha sido la reacción de la todavía mujer del torero, pero hay un detalle muy significativo que pone en jaque la buena sintonía que supuestamente había entre Ponce y Cuevas.

NO ELIMINA FOTOS ANTIGUAS

Este viernes, el diestro ha decidido dejar de seguir en Instagram a Paloma Cuevas, la madre de sus dos hijas, Paloma y Blanca.

A pesar de que él no ha borrado ninguna de las imágenes que publicó de Paloma y todavía conserva publicaciones antiguas en las que aparece con ella . De momento, Cuevas continúa siendo amiga en las redes de su ya expareja.

Esta decisión del valenciano ha generado muchas dudas entre los seguidores que la empresaria y el torero comparten. Si es tan cordial la relación que mantienen, no entienden por qué Ponce rompe de este modo con su exmujer.

Otro dato a tener en cuenta es que entre los seguidores de Ponce sigue estando Cuevas. En cierta manera, esto suaviza la situación, ya que, al menos, Ponce no la ha bloqueado, sino que simplemente la ha dejado de seguir.

Ahora, se abre una nueva etapa en sus vidas en la que Ponce y su nueva pareja, Ana Soria, acapararán portadas de la prensa rosa. La del torero y la veinteañera es una historia que comenzó hace algunos meses, pero en cuestión de pocos días, se ha convertido en el idilio más sonado del verano.

¿QUIÉN ES ANA SORIA?

A la joven, de 22 años, que ha conquistado el corazón de Enrique Ponce, de 48 años, le ha cambiado dicalmente la vida. Ha pasado del absoluto anonimato a convertirse en la mujer más buscada por los 'paparazzi'.

La joven estudia Derecho y se prepara, tal y cómo ha desvelado su familia, para asumir la dirección del despacho de abogados familiar. La Universidad se encuentra en Córdoba, donde reside, a pesar de que su casa se encuentre en Almería, donde también pasa largas temporadas.

Este pasado miércoles de madrugada, la almeriense compartió en su cuenta de Instagram una imagen con el mismo 'look' de sus dos últimas publicaciones, pero a diferencia del resto, en este 'post' no ha querido bloquear el apartado de los comentarios. Y es que Ana Soria ya acumula más de 60.000 seguidores y tras una semana abriendo y cerrando su perfil, ha decidido no esconderse más y hacer frente a todos los comentarios sobre su mediático romance con el torero.

La relación con Ponce habría comenzado cuando ella le escribió a través de su cuenta de Instagram, y parece ir en serio, ya que los tortolitos habrían pasado este último fin de semana en Mojácar, en la costa almeriense, en un apartamento de lujo que posee la familia en la urbanización Marina de la Torre.