La llegada de los Reyes Felipe y Letizia y sus hijas a la inauguración del Festival de Teatro Clásico de Mérida provocó el miércoles por la noche un cruce de vivas a la monarquía y a la república por parte de los espectadores asistentes a esta sesión, en una escalada de aplausos y abucheos.

Felipe VI, Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía llegaron a última hora de la tarde a la capital extremeña dentro de la gira de los Reyes por todas las autonomías tras levantarse el estado de alarma a causa de la pandemia de coronavirus. Tras llegar al Parador Nacional de Turismo, visitaron luego después el Museo de Arte Romano y desde ahí se trasladaron al Teatro Romano para asistir a la apertura de la 66 edición del Festival de Teatro Clásico, una presencia que pretende ser un respaldo de la Corona a los espectáculos teatrales tras la crisis que están atravesando a causa de la pandemia de coronavirus.

"NO ES POLÍTICA, ES TEATRO"

Al entrar los Reyes y sus hijas en el Teatro Romano fueron recibidos con aplausos y vivas al rey de gran parte del público puesto en pie, pero después empezaron a mezclarse con algunos silbidos y con vivas a la república. Esa actitud de los críticos con la monarquía provocó que los favorables a ella redoblaran sus aplausos y sus vivas al rey y a España entre muestras de agradecimiento de los miembros de la familia real. Pero a su vez también fueron subiendo el tono los defensores de la república y hubo varios minutos de competencia entre quienes defendían ambas posiciones.

Al sentarse los reyes y sus hijas en sus localidades han cesado las voces, aunque después han vuelto tímidamente a escucharse algunas. En medio de ellas, un espectador gritó "esto no es política, es teatro" y cesaron definitivamente los aplausos y silbidos ante la inminencia del inicio del espectáculo.

La pieza que inauguró el Festival de Teatro Clásico es 'Antígona', un montaje de la obra de Sófocles dirigido por el dramaturgo mexicano David Gaitán y protagonizado por la actriz Irene Arcos. Los reyes estuvieron acompañados, entre otras autoridades, por el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y por el ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes.