El Lorazepam es un ansiolítico que suele venderse bajo el nombre comercial Orfidal. Se trata de un medicamento que únicamente se puede tomar puede tras haber sido recetado por un médico antes. Sin embargo, puede provocar algunos efectos secundarios, como la ataxia.

Si miramos el prospecto del Lorazepam o del Orfidal de 1mg en comprimidos, veremos que la ataxia aparece como un posible efecto adverso que suele aparecer de forma “frecuente” en los pacientes que lo toman. 

¿Qué es la ataxia?

En el propio prospecto aparece clasificada como un trastorno del sistema nervioso que provoca descoordinación motora y problemas en el habla. Eso hace que las personas tengan dificultades para caminar, mantener el equilibrio o coordinar los movimientos de las manos.

La ataxia es el resultado de un daño en el cerebelo, la parte del cerebro que controla la coordinación muscular. Además del consumo de Lorazepam, la ataxia también puede ser provocada por un abuso de alcohol, accidentes cerebrovasculares, degeneración cerebral, esclerosis múltiple o tumores.