Inesperado ha sido el triunfo de Coda. Caras de asombro y aplausos de todo tipo se ha llevado la mejor película del año. Es la historia de una familia sorda que se ha hecho oír en los Óscar. La cinta también ha encumbrando a Troy Kotsur, el primer hombre sordo en lograr el ansiado galardón de mejor actor de reparto.

Una gala eclipsada por un Will Smith fuera de control. Ofendido por una broma sobre el peinado de su mujer, el actor no dudó el propinar una bofetada a Chris Rock, uno de los presentadores de la gala. Una salida de tono que minutos después trataba de justificar, entre lágrimas, mientras recogía su premio a mejor actor.

Una victoria agridulce que llega tras ser nominado en tres ocasiones.

Para la mejor actriz, la tercera también ha sido la vencida. La mejor dirección ha sido para Jane Campion y ‘El poder del perro’, que esperaba recibir más galardones.

Una noche de sorpresas y de música, la de las bandas sonoras que ponen la guinda a una fiesta de cine.