El Barcelona arrancó la liga con mucha potencia, pero ya se sabe que la potencia sin control no sirve de nada. Eso fue precisamente el origen de los problemas ante un Rayo Vallecano que le tiene cogida la medida al Camp Nou y que supo distribuirse de forma eficaz para desactivar a los azulgranas (0-0). En la rueda de prensa tras el choque, el técnico del Barcelona, Xavi Hernández, reconoció que los suyos no jugaron bien, aunque explicó que quizá hay que ir más allá para entender la falta de gol. "Nos ha pesado todas las expectativas que se están generando que son buenas y las aceptamos, mejor que si todo fuera negatividad, pero nos ha faltado temple", ha zanjado el culé. Por su parte, el entrenador del Rayo, Andoni Iraola, elogió a sus jugadores por un partido correcto que sirve para quitarse de encima a uno de los cocos del campeonato nada más empezar.