A las 5.24 de la mañana, han recibido una alerta en este centro nacional de salvamento marítimo. Desde el pesquero gallego pedían ayuda. Solo 18 minutos después sonaba la alarma. Es la radio baliza que indicaba que el barco había tocado agua a 450 kilómetros de terranova y 2.900 de Galicia. Con esa localización, enviaban a los dos pesqueros más cercanos a esa zona: un español y un portugués que estaban faenando y que de hecho tuvieron que recoger redes. A las 10 y media de la mañana, llegaban, pero ni rastro del barco gallego. Encontraban dos balsas salvavidas. En una, tres supervivientes y cuatro cadáveres y restos del barco desperdigados. La segunda balsa iba vacía y se pudo activar automática y no tener tiempo de usarla. Desde Canadá enviaban dos aviones, un helicóptero de rescate y un buque mercante. A las cuatro de la tarde recuperaban más cuerpos del agua. Buscan en superficie entre los restos del barco y si hubiera otras balsas a la deriva con supervivientes. Las causas se sabrán, pero ahora la única certeza es que faenaban con olas de más de cuatro metros de altura.