Innumerables veces Boris Johnson ha pedido disculpas en la Cámara de los Comunes por las acusaciones del ya famoso 'partygate'. Lo ha hecho el mismo día que presentaba en el Parlamento el informe oficial sobre las fiestas celebradas por el Gobierno durante el confinamiento. La Policía Metropolitana afirma haber recibido 300 imágenes y 500 páginas de documentos con información sobre dichos eventos. Johnson hace equilibrios para mantenerse en el poder entre peticiones de dimisión ante la pasividad de sus propios diputados y las críticas de su antecesora que Johnson ayudó a derribar. Una sesión de control agitada que ha terminado con la expulsión del líder del partido nacionalista escocés. Boris Johnson está acorralado pero por el momento no parece tener intenciones de abandonar el número 10 de Downing Street.