Uno de los equipos de rescate procedentes de la provincia china de Yunnan desplazado hasta Birmania ha hallado con vida este domingo a un anciano que había quedado sepultado bajo los escombros tras el terremoto en la ciudad de Naipyidó. El hombre ha permanecido atrapado casi 40 horas bajo los restos de un hospital de tres plantas, donde se encontraba en el momento del temblor y que se vino abajo. El equipo de Yunnan detectó los signos vitales del anciano y logró liberarlo tras una complicada operación. El último balance de víctimas ha elevado a 1.644 los muertos y a 3.408 los heridos, con al menos 139 personas todavía en paradero desconocido.