El Ejército español adquirirá a la empresa de equipamiento militar Instalaza, ubicada en Zaragoza, lanzagranadas por un importe de 22,4 millones. Las armas son del tipo C-90 y se presentan en seis versiones distintas que se irán suministrando a las fuerzas armadas a lo largo de un periodo de cuatro años. Con esta modernización de sus medios de combate, las Fuerzas Armadas dan otro paso en su proceso de continua puesta al día de sus recursos.

El acuerdo, según informe la publicación infodefensa.com, incluye la compra también de munición especial para el entrenador del sistema TR90. La empresa entregará paulatinamente tres versiones de su C90-CR y otras tres más del sistema C90-CS, añade la citada revista especializada.

Estas armas pueden disparar desde espacios cerrados y pequeños. Los detalles técnicos de los lanzagranadas objeto de la compra indican que se trata de la versión C-90-CR-AM, que tiene un doble objetivo, antiblindaje y fragmentación. Su peso es de 5,2 kilos y puede llegar a 350 metros a blanco puntual y a 700 metros a blanco de aérea.

Mayor capacidad de penetración

Su capacidad de penetración, continúa infodefensa.com, es de 220 mm en acero de blindaje y 0,6 metros en hormigón. El presupuesto en este caso es de casi cinco millones.

Otro de los elementos armamentísticos que facilitará Instalaza al Ejército de tierra español es una serie de C-90-CR-RB contracarro, con un presupuesto de 840.000 euros. En este supuesto, se ofrece mayor capacidad de penetración. 

Además, Defensa destina 2,7 millones en el modelo C90-CR-BK (antibúnker), que ofrece un peso de 5,4 kilos para distancia de 350 metros en blanco puntual y penetración de 140 mm en acero de blindaje y de 0,3 metros en hormigón.

Asimismo, la empresa de armas facilitará las tres versiones de doble finalidad (antiblindaje más fragmentación, contracarro y antibúnker) del lanzagranadas preparadas para el disparo desde recintos cerrados y pequeños (del modelo C-90-CS).