El Ayuntamiento de Zaragoza ha dado un paso más en el largo proceso de reforma que acompaña a la plaza Salamero. Mientras continúan los trabajos de retirada de la losa que cubre el párking subterráneo, el área de Urbanismo ha sacado a licitación por 70.835 euros los pliegos para el proyecto de diseño de la supermanzana, que incluirá la calle Morería y también el paseo que conectará la propia plaza con la iglesia de San Ildelfonso. 

El consistorio quiere recuperar la relación lógica e histórica con la calle Cinco de Marzo y la también conocida como iglesia de Santiago el Mayor, algo que solo se conseguirá si se crea un paseo que proporcione esa continuidad y que se lograría integrando las calzadas de ambos lados de la avenida César Augusto a través una plataforma única de preferencia peatonal.

Esta propuesta, según los pliegos técnicos, debe tener en cuenta la regeneración de la anteplaza del templo y la reurbanización que quiere impulsar el ayuntamiento ya que la idea pasa por conseguir la máxima integración visual y funcional de la iglesia, potenciando su visibilidad desde el paseo Independencia.

Esto solo se conseguirá si contempla el realce de la alineación de las calles San Miguel y Cinco de Marzo como eje director de la ordenación, tal y como se matiza en el informe del servicio de Ingeniería de Desarrollo Urbano.

Esta conexión podría pasar por una elevación de la calzada en el tramo afectado, que obligaría a los conductores a minimizar la velocidad por la avenida César Augusto, con un tráfico denso a diario.

El proyecto deberá definir la regeneración y la obras de urbanización de un área de 9.683 m², que incluye la plaza de Salamero, la calle Morería y parte de la avenida de César Augusto. Esto no significa que vaya a urbanizarse todo a la vez. De hecho, el proyecto incluirá las separatas de las obras que afecten a los accesos del párking, tanto rodados como peatones, y de las tres zonas a urbanizar.

Primero los peatones 

El 70% de la superficie afectada se destinará al peatón, por lo que se eliminarán plazas de aparcamiento y se optimizará el espacio destinado a carga y descarga. También se reducirá el número de carriles de tráfico rodado limitando su acceso a los vehículos de emergencias, comerciales o de residentes. La plaza será una plataforma única y la velocidad se limitará a 20 km/h.

 El ayuntamiento quiere mejorar la eficiencia energética de las instalaciones, introduciendo nuevos elementos de producción de energía fotovoltáica y de aprovechamiento de aguas pluviales en el párking, que mantendrá la mayoría de sus plazas. Todavía está por decir que nuevos usos tendrá, y se está barajando que sea una zona de carga de vehículos eléctricos e incluso un almacén logístico.

Los trabajos de retirada de la losa continúan y se prolongarán durante el verano. Los técnicos todavía tienen que decidir cómo será la nueva cubierta, que soportará un peso de 1.300 kg/m2 una vez reconstruida, por lo que las propuestas técnicas deberán ser coherentes con esta limitación.