El Ayuntamiento de Zaragoza está desmantelando estos días el Solar del Circo Social, un espacio en la calle Las Armas, próximo a la plaza Mariano de Cavia. Este lugar acogía antes de la pandemia un proyecto de inserción que trabajaba con los jóvenes del Gancho para ayudarles a formarse mientras practicaban deporte y se divertían.
Además, este solar acogía en su momento una parte del mercadillo de Las Armas, que se celebraba un domingo de cada mes. Ahí era donde estaba el famoso contenedor portamercancías pintado en rojo y celeste, que se convirtió un atractivo para todos los que quisieran presumir de fondo en Instagram.
Desde el consistorio explican que desde que comenzó la pandemia la parcela estaba sin uso y que se encontraba en un estado “insalubre y abandonado”, a pesar de que son dos sociedades municipales las que se tenían que haber encargado del mantenimiento del lugar. Cuando el solar lo utilizaba la Escuela de Circo Social era Zaragoza Cultura, a través de un convenio, la que se encargaba de limpiar y adecentar el terreno mientras que después, cuando el covid impidió la celebración de cualquier evento, Zaragoza Vivienda recuperó la gestión de este “emblemático” lugar.
Además, informan desde el Ayuntamiento de Zaragoza, los contenedores de mercancías que servían de almacén estaban okupados y en muy mal estado. Ahora, el ayuntamiento los ha limpiado y desinfectado y los ha trasladado hasta otros equipamientos: tres se irán a Miralbueno, a un circuito de coches teledirigidos, y dos a los Pinares de Venecia, al velódromo. Asimismo, fuentes del consistorio insisten en que la intención es recuperar la actividad en el solar y que se permitirá que las entidades del barrio, así como el Centro Municipal de Servicios Municipales y los responsables de los Programas de Infancia que utilicen la parcela. “El objetivo es limpiarlo para utilizarlo para juegos y esparcimiento y quitar presión a las plazas cercanas”, aseguran.
Críticas de la oposición
Desde ZeC y desde Podemos han criticado esta intervención al considerar que pone fin a un proyecto de inserción social “sin aportar ningún tipo de información y sin previo aviso a los colectivos”, señaló la concejala Luisa Broto, algo que desmienten desde el equipo de PP y Cs. El circo social, han apuntado desde Zaragoza en común, es “un ejemplo de desarrollo comunitario e intercultural” y que el desmantelamiento del solar evidencia “el desprecio constante al tejido cultural de la ciudad”. El portavoz morado, Fernando Rivarés, que era concejal de Cultura en el anterior mandato, también ha criticado la actuación del ayuntamiento en este sentido.
Desde la Escuela de Circo Social recuerdan que el solar era un espacio de gestión comunitaria desde 2014 y que cuando comenzó la pandemia no pudieron continuar con su agenda de actividades. En septiembre, afirma esta entidad, les comunicaron que no podían seguir utilizando este espacio porque estaba en muy malas condiciones por lo que tuvieron que buscarse otro lugar “por su cuenta”, que encontraron en las instalaciones del colegio Santo Domingo.
“No era un espacio ideal pero era emblemático porque pasaban muchas cosas y que fuera al aire libre atraía a muchos jóvenes del barrio que encerrados no querían participar en ninguna actividad. Hay que escucharles y saber lo que prefieren y para nosotros era importante dar continuidad a estos chavales. Era su espacio”, explican desde la Escuela, que sigue trabajando con algunos de ellos en el colegio Santo Domingo. Además, aseguran, no saben dónde está todo el material que tenían almacenado en los contenedores del solar. “Era emblemático”, cuentan.
