El barrio rural de Zaragoza de Casetas ha decidido apostar por las peatonalizaciones de sus plazas. Después de haber actuado en la de José Lasheras, ahora la alcaldía ha solicitado hacer lo mismo en la de Santiago Castillo.

Este proyecto, que hace años que se planteó y va con retraso, se enmarca en el convenio de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ). El consistorio zaragozano ha sacado a licitación las obras por 99.999 euros y, según el alcalde del barrio de Casetas, Jorge Eseverri, las obras podrían estar terminadas a finales de noviembre o principios de diciembre.

La plaza no se convertirá en una supermanzana, pero por poco. Hace tiempo que la Alcaldía decidió limitar la circulación de los coches para favorecer así el tránsito peatonal y convertirla en un punto de encuentro y reunión vecinal.

Lo que se va a hacer ahora es elevar la calzada a la altura de la acera, es decir, extender la cota cero por toda la superficie para embellecer la zona. También está previsto que se actúe en las zonas verdes y que se cambie y actualice el alumbrado.

Por ahora se ha descartado restringir la circulación en las calles colindantes a la plaza, Huesca y Aragón, por las que podrá discurrir el tráfico, aunque a menor velocidad.

El alcalde de Casetas ha explicado que se trata de una reivindicación que lleva años a la espera de hacerse realidad. Forma parte del anterior convenio con la DPZ, una de las tantas obras que se quedaron sin ejecutar y que durante este ejercicio el consistorio quiere llevar a cabo.

Tras la peatonalización de la plaza, quedará todavía en el tintero la renovación de los vasos de agua de las piscinas municipales, que se hará tras el periodo estival.