Jorge Azcón está cumpliendo con su palabra y cada vez que llega el aniversario de una de las tantas atrocidades realizadas por ETA o los GRAPO organiza un homenaje. Un acto con los familiares de las víctimas, para honrarles, recordarles y que no caigan en el olvido. Para hacer justicia y que al terrorismo se le llame por su nombre, sin eufemismos, sin medias tintas.

No es algo que haya inventado el conservador. Se ha hecho siempre, aunque con claras diferencias según el color del Gobierno. Por ejemplo, en la pasada legislatura ZeC centró sus esfuerzos en recordar a las víctimas del franquismo.

Recordando a las de ETA, Azcón está diciendo que el PP no se rinde ante Bildu, que no pacta con los que en su partido llaman «filoetarras». Un dardo dirigido directamente a las filas del PSOE por los pactos de Pedro Sánchez con esta formación.

Mientras el popular homenajeaba a las víctimas del Hotel Corona junto a representantes de PSOE, Podemos y ZeC, también de Vox, en los despachos de estas tres formaciones se estaba acordando el texto que acompañaría a una denuncia conjunta sobre la decisión del Gobierno de PP-Cs de retirar el nombre de Che Guevara de una calle y un parque. ¿Casualidad? Seguramente no porque hace días que conocían esta decisión de PP-Cs.

Según explicaban, la vicealcaldesa, Sara Fernández, ha cedido ante la ultraderecha, que le exigía retirar el nombre de este ideólogo y comandante de la revolución cubana. Desde el equipo de Gobierno de PP-Cs defienden que esta decisión fue avalada por el pleno municipal de julio de 2019, pero claro, salió adelante con los votos a favor de PP, Cs y Vox.

No es casualidad que las formaciones de izquierdas lanzaran su comunicado dos horas después de que Azcón, en su presencia, reivindicara como atentado terrorista el incendio del Hotel Corona, pese a que nunca se ha reconocido como tal.

Hasta el año 2009, el Tribunal Supremo no asumió que el incendio no fue circunstancial, sino intencionado o un atentado.

Sus víctimas han sido indemnizadas con cargo a la ley de ayudas a las víctimas del terrorismo pero nunca se ha considerado que el incendio que el 12 de julio de 1979 se originó a primera hora de la mañana en la cafetería y que acabó con la vida de 78 personas y dejó heridas a 113 fuera un atentado terrorista.