Las asociaciones de vecinos de Hispanidad y La Floresta han elevado una queja ante el Justicia de Aragón por la postura «incomprensible» que, según ellos, está manteniendo la Diputación Provincial de Zaragoza con la calle Hayedo, que es una de las primeras adyacentes de la prolongación de Gómez Laguna. La institución pide al ayuntamiento de la capital aragonesa un millón de euros por un terreno de 365 metros cuadrados por el que discurre una acequia y sin este suelo el consistorio no puede acometer unas obras que harán transitable este vial y que son muy reclamadas por los habitantes de la zona.

Dado que el ayuntamiento consideró excesivo el precio fijado por la DPZ, el asunto está ahora pendiente de resolución en el Juzgado de Expropiación Forzosa. Mañana visitará la zona el lugarteniente del Justicia para hacerse eco de las reclamaciones de los vecinos pero estos lamentan tener que haber llegado a este punto. «Es incomprensible y no dan respuesta a nada. No tienen argumentos para defender lo que piden», lamentan.

Desde la institución, consultados por este diario, confirman que no hay novedad al respecto y que no han cambiado de postura. Será el juzgado pues el que determine el precio. «La DPZ pide la exorbitada cantidad de casi un millón de euros», recuerdan las asociaciones de vecinos, que dicen que sea cual sea el coste para el ayuntamiento este ya tiene una partida reservada para hacerle frente.

Lo que exigen estas entidades es que la DPZ permita la ocupación anticipada de los terrenos para poder empezar con las obras y que después el consistorio pague lo que considere la Justicia. Si las obras no se llevan a cabo antes de noviembre (cuando se corta el agua de la acequia) tendrán que posponerse a finales del 2022.

«En la edad media surgió la figura del Justicia para luchar contra el abuso de poder de sus gobernantes. Parece mentira pero probablemente nos encontramos ante un caso de los que en tiempos del feudalismo ya se combatían», denuncian los vecinos sobre el comportamiento de la DPZ.