La reforma de la plaza de Salamero avanza tanto en sus obras de emergencia como en el desarrollo del futuro diseño. A finales de julio se terminó la penúltima fase de las labores de sustitución de la losa exterior del párking de la plaza, que ha consistido en el hormigonado y creación de la nueva cubierta, mientras que el Área de Urbanismo y Equipamientos ha adjudicado esta mañana el contrato para diseñar el proyecto de este nuevo espacio público.

Los técnicos municipales han adjudicado este viernes la redacción del proyecto de la nueva plaza de Salamero a Lignum SL, por un importe de 48.876,74 euros (IVA incluido), lo que supone una rebaja del 31% respecto al precio base de licitación fijado en 70.835,72 euros. Una vez formalizada la adjudicación de las tareas para diseñar el proyecto, la empresa adjudicataria contará con un plazo de tres meses. El documento deberá definir la regeneración y obras de urbanización de un área de abarca 9.683 metros cuadrados, que incluye la plaza de Salamero, la calle Morería y parte de la avenida de César Augusto, integrando las calzadas actuales en plataforma única de preferencia peatonal y recuperando la relación lógica e histórica con la calle Cinco de Marzo y la iglesia de Santiago el Mayor. Si bien el proyecto incluirá las separatas de las obras que afecten a los accesos (rodados y peatonales) al estacionamiento subterráneo, y se dividirá en ámbitos de actuación para poder independizar su ejecución, según las instrucciones que emita la dirección de los trabajos, y al menos las obras que afecten a la avenida de César Augusto se preverán en una fase independiente.

Se comenzará así a redactar y planificar lo que terminará siendo la futura plaza, "un espacio de calidad, digno e innovador que cambiará la fisionomía de la zona y mejorará la calidad de vida de los zaragozanos y, sobre todo, de los residentes, trabajadores y comunidad educativa de la zona", ha apuntado el consejero de Urbanismo y Equipamientos, Víctor Serrano (Cs).

El diseño del proyecto deberá contemplar y estudiar las propuestas que los diferentes colectivos han ido trasladando durante los últimos meses al consejero de Urbanismo, quien ha mantenido reuniones a este respecto con los centros educativos del entorno, los colectivos vecinales, las agrupaciones de comerciantes, la FABZ, la Unión Vecinal Caesaraugusta, ECOS y la Junta Municipal del Distrito Centro, entre otros. No obstante, como ya avanzó Serrano, se prevé impulsar un proceso abierto y ágil, que no se dilate en el tiempo, para que la ciudadanía pueda proponer opciones que se estudiarán y se incorporarían al proyecto, en caso de su viabilidad, en el último tramo de su redacción.

No obstante, la empresa encargada del diseño va a verse sometida también a una presión extra: tras la reforma de la plaza Santa Engracia, cuyo resultado no gustó a todos por tener mucho cemento y poco árbol, la oposición a PP y Cs en el ayuntamiento ya ha advertido que espera que el resultado de Salamero no sea el mismo.

Quinta fase de las obras

Por otra parte, las obras de emergencia para el cambio de la losa superior del párking de la plaza de Salamero han terminado la cuarta fase de las cinco previstas en las que se dividieron los trabajos. Durante todo el mes de julio, se ha procedido al hormigonado y reconstrucción de la losa superior del aparcamiento, que hace de base de la plaza. Según los criterios técnicos de la dirección de la obra, y dado que se debían emplear unos 1.500 metros cúbicos de hormigón, se optó por dividir las tareas en cuatro jornadas: los días 5, 12, 17 y 24 de julio. En cada una de ellas se ha ido echando el hormigón y se la ha implantado un sistema de riego por aspersión para que el material fraguara y curara bien.

En estos momentos, la nueva estructura superior debe reposar y asentarse bien durante varias semanas antes de comenzar la quinta y última fase de los trabajos de emergencia a que ha tenido que acometer el ayuntamiento tras el hundimiento parcial de la plataforma en enero de 2020, que meses después se averiguó, mediante informes técnicos y peritajes independientes, que se debía a un fallo de tipo constructivo que se extendía en toda la losa y sus apoyos en los pilares. El consistorio ha sido el encargado de costear esta intervención, si bien la responsabilidad sería de la empresa adjudicataria, por lo que tendrá que decidirse quién paga finalmente las obras.

De esta manera, las actuaciones de estabilización de la plaza llegan a su última fase, la de los remates, para quedar después a completa disposición de las obras que terminen creando la nueva plaza, cuyo proyecto comenzará a redactarse próximamente tras la adjudicación de su redacción esta mañana.