Las aulas se vuelven a llenar de alumnos estos días, las oficinas de trabajadores y los políticos del Ayuntamiento de Zaragoza, para no ser menos, también se han puesto ya manos a la obra. Hay concejales que llevan varios días e incluso semanas en la casa consistorial, lejos de sus lugares de vacaciones, pero ha sido ahora cuando se ha querido escenificar el regreso de la política municipal. Para ello, el alcalde, Jorge Azcón, y la vicealcaldesa, Sara Fernández, se han reunido este martes con los portavoces del resto de los partidos para encauzar lo que queda de año. ¿El resultado? Buenas palabras pero poca concreción.

Así, durante las cuatro reuniones mantenidas a lo largo de la mañana, el equipo de PP y Cs no ha conseguido arrancarle ningún compromiso a la oposición. Ni tampoco ha ocurrido del revés. Cada partido le ha transmitido al alcalde y a la vicealcaldesa sus inquietudes de cara a la próxima discusión sobre las ordenanzas, la fecha del debate del Estado de la Ciudad o los presupuestos. Pero no hay nada pactado. Ni Vox, socio preferente durante estos dos años, ha llegado a prometer nada. Es más, a la salida de su encuentro con Azcón y Fernández, el portavoz de la ultraderecha, Julio Calvo, ha vuelto a repetir «que está siendo muy difícil apoyar a este Gobierno» porque, según ha declarado, «no se nota que sean de centroderecha».

Más allá de las amenazas, que Vox pocas veces ha cumplido, el primero de los debates que tendrá que zanjar el equipo de PP y Cs será el de qué partidas del actual presupuesto se declaran no disponibles. Tienen que conseguirse 8,7 millones de euros de los que se iban a destinar a otros proyectos este 2021 para tapar el agujero en las cuentas que quedó tras el ejercicio pasado. Azcón trató de cerrar aquel asunto en pleno verano pero no negoció qué inversiones dejar sin ejecutar, lo que le costó el no de los de Vox. Así que les toca volver a los despachos, aunque presumiblemente el acuerdo llegará pronto.

En la comparecencia de la vicealcaldesa tras las reuniones (el alcalde no ha hablado ante los medios), esta ha asegurado que todas las conversaciones fueron «muy agradables», aunque no se ha aventurado a descubrir si con algún grupo había notado más afinidad que con otro. Preguntada entonces directamente por Vox, Fernández (Cs) ha dicho que seguirán trabajando para alcanzar acuerdos con todos los grupos políticos. «Somos 14 concejales, sabemos que estamos en minoría (la mayoría son 16) y estamos dispuestos a trabajar y a sumar», ha afirmado. La de Ciudadanos se ha limitado a pedir consenso en «los grandes proyectos de ciudad» y a pedir unidad en estos momentos, cuando los fondos europeos pueden comenzar a llegar a la capital aragonesa. Además, Fernández ha asegurado que sí tienen intención de aprobar un presupuesto para el año que viene.

Las peticiones de la izquierda

Pero a pesar de que la vicealcaldesa no ha resultado demasiado explícita, Vox ha sido este martes el centro del debate de las reuniones mantenidas con todos los grupos. Todos, según ha desvelado el portavoz de la ultraderecha, Julio Calvo, le han preguntado a Azcón y Fernández por su relación con los de Santiago Abascal.

Más allá, Calvo ha mantenido el mismo tono que en los últimos meses y ha asegurado que están «decepcionados» con PP y Cs por asumir cuestiones que consideran del «acervo ideológico de la izquierda». Incluso ha advertido que «o cambia o no podremos apoyarle», en referencia Azcón, una amenaza que no es la primera vez que verbalizan y que pocas veces han cumplido.

Es más, Calvo ha negado que haya existido nunca «tensión», ni cuando votaron en contra de qué partidas iban a dejar sin ejecutarse, pero sí que ha anunciado que van a ser «muy exigentes». En el punto de mira puso a las ayudas a la cooperación y las políticas de igualdad. Nada nuevo.

Por su parte, la portavoz del PSOE –el grupo mayoritario de la oposición–, Lola Ranera, se ha limitado a comentar que ha hablado con el alcalde del calendario de los próximos meses, cuando tendrán que debatirse las ordenanzas, los presupuestos y tener lugar el debate del Estado de la Ciudad. Desde ZeC, Pedro Santisteve ha pedido más compromiso medioambiental y social y le ha reprochado a Azcón que su relación con Vox «haya roto consensos» históricos en materia de igualdad. Fernando Rivarés, de Podemos, ha exigido asimismo avances en movilidad sostenible, vivienda y progresividad fiscal.

Este miércoles Azcón se reunirá con todo su equipo de Gobierno en el Seminario para marcar la estrategia de cara a lo que queda de mandato. Menos de dos años ya.