Las actividades culturales que hay previstas para la semana del Pilar empiezan a tomar forma. Así lo aseguró este martes la vicealcaldesa de Zaragoza, Sara Fernández, que sin referirse a las fiestas, puesto que están oficialmente prohibidas, anunció que la Consejería de Sanidad del Gobierno de Aragón les ha dado visto bueno a todos los actos que les han presentado hasta ahora. Entre las novedades que desveló está el aforo de la Ofrenda de flores a la virgen, que se quedará en 20.000 personas tal y como se había previsto desde un primer momento para la versión reducida de este evento.

Así, el recorrido será el ya anunciado y partirá desde el parque de Macanaz para cruzar el río por el puente de Santiago. Estará vallado y oculto al público y lo que todavía no se ha decidido es cuántos oferentes individuales podrán participar.

«En una ofrenda normal nunca se controlan los individuales por lo que es un proceso muy complejo. Estamos acabando de perfilar todos esos detalles», explicó Fernández, que aseguró que Sanidad les ha dado el «ok» a todo lo presentado. «No hay ningún problema y se va seguir adelante», añadió.

Con respecto a los aforos en las plazas temáticas, en las que habrá conciertos, estas dispondrán de espacio como máximo para 250 personas sentadas y se está planteando cobrar por el acceso para asegurarse que los que reserven hueco acaben acudiendo y no dejen su silla sin ocupar. No obstante, el precio de la entrada podría devolverse después o incluso donar lo recaudado a diferentes asociaciones. Aunque también cabe la posibilidad de que no se cobre nada.

Sobre el escenario que habrá en el Parque del Agua, Fernández explicó que todavía faltan por definir los aforos junto a Sanidad, si bien en el ayuntamiento ha lanzado ya los procesos para alquilar la estructura, el sonido y la iluminación para este espacio. Y en las memorias justificativas de estos contratos se estima que la capacidad máxima será de 4.000 personas sentadas «según la normativa actual».

El escenario se situará próximo a la noria de agua que hay entre los campos de golf del Parque del Agua y la avenida José Atarés, casi justo detrás de la comisaría de la Policía Nacional y la previsión es que haya cuatro actuaciones del 9 al 12 de octubre, es decir, durante los primeros días de lo que hubieran sido las fiestas. Este espacio viene a sustituir al que tradicionalmente ocupaba el de la plaza del Pilar, en frente del ayuntamiento.

Jotas mañana y tarde  

En la plaza del Pilar lo que sí que habrá es un escenario para jotas y según consta en la memoria justificativa de la licitación para alquilar el escenario el aforo previsto, si Sanidad no lo cambia, es de 900 personas sentadas. Aquí las actuaciones tendrían lugar del 10 al 17 de octubre y habría dos al día, por la mañana y por la tarde.

Por último, en el Jardín de Invierno, en el Parque Grande José Antonio Labordeta, el consistorio también prevé instalar otro escenario y un espacio con capacidad para 950 personas. Allí habrá actuaciones los días 10, 12, 13, 14, 15 y 16.

La programación que tendrá lugar en todos estos escenarios todavía no está cerrada, o por lo menos así lo aseguró la vicealcaldesa, que también dijo que la ampliación de aforos y horarios por parte de la DGA no afecta a los actos previstos por el consistorio para el Pilar.

Asimismo, Fernández también anunció que no va a haber fuegos artificiales este año ya que se podrían entender como «un fin de fiestas» cuando de lo que se trata es de huir ese concepto. «No hemos presentado ninguna propuesta de fuegos artificiales a Sanidad porque son actividades que congregan a un público que no podemos controlar» explicó.

La ausencia de pirotecnia se une a otros actos que este año tampoco tendrán lugar como el montaje del Espacio Zity, las casetas de comida de las casas regionales en la plaza Aragón, los pasacalles, el pregón, los food trucks o el Rosario de Cristal. Sí que podría haber, aunque todavía no es seguro, cabezudos, aunque no en el formato de siempre.