La campaña de prevención de las distracciones al volante, que en Aragón causan casi cuatro de cada diez accidentes mortales, ha empezado contado hoy en la comunidad con el montaje de un punto de control y vigilancia junto al peaje de la AP-68 en Alagón. La medida durará hasta el miércoles que viene.

Se da la circunstancia de que esta mañana, en el citado control, ha sido detectado un conductor que ha dado positivo en drogas por la ingestión de anfetaminas. Primero ha dado negativo en consumo de alcohol, pero, tras analizar una muestra de saliva de la misma persona, se ha comprobado que había tomado la citada sustancia, un resultado que tiene que ser ahora verificado en laboratorio.

Las estadísticas señalan que los despistes han sido la causa del 37% de este tipo de siniestros, por delante del alcohol, que representa el 15%, y de la velocidad, que supone el 14%. La campaña ha sido organizada por la Dirección General de Tráfico (DGT).

Se inscribe en la Operación Foco en la Carretera, que desarrolla en el ámbito europeo la asociación RoadPol (European Roads Policing Network) y que este año se ha hecho coincidir con la Semana Europea de la Movilidad.

Además de los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil que vigilarán las vías interurbanas, también están invitadas a sumarse a esta campaña las policías municipales que pueden llevarla a cabo en el ámbito urbano, como es el caso de la de Zaragoza capital, que participa activamente.

Conductor que ha dado positivo esta mañana en un control de consumo de drogas al volante. JAIME GALINDO

También se contará con los medios automatizados de los que dispone DGT con 20 cámaras instaladas en las carreteras de Aragón, a través de las cuales se puede constatar, entre otras cosas, si el conductor hace uso del móvil mientras conduce.

Los datos disponibles indican que el uso del teléfono móvil durante la conducción multiplica por cuatro el riesgo de sufrir un accidente. Este riesgo puede ser equiparable a la conducción con exceso de alcohol.

La DGT precisa que marcar un número de teléfono móvil, responder a una llamada telefónica, leer o contestar a un mensaje, encender un cigarrillo, ajustar la radio o el reproductor de CD, mientras se conduce supone apartar la vista de la carretera durante unos segundos, tiempo en el que el vehículo circula sin control y pueden surgir circunstancias que provoquen un grave accidente.

Casi 3.000 denuncias en el 2020

Tras un minuto y medio hablando por el móvil, incluso con manos libres, el conductor no percibe el 40% de las señales, su velocidad media baja el 12%, el ritmo cardíaco se acelera bruscamente durante la llamada y se tarda más reaccionar.

En 2020, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil interpuso en Aragón 2.862 denuncias por circular haciendo uso del teléfono móvil. Por su parte, el uso de cascos o auriculares conectados a aparatos reproductores de sonido, distintos del teléfono móvil, también han sido motivo de denuncia para 1.011 conductores el año pasado en la comunidad autónoma puesto que el uso de los mismos mientras se conduce está prohibido.

Asimismo, en los primeros siete meses de año 2021, se han interpuesto 6.563 denuncias por infracciones relacionadas con la distracción, que constituyen el 11% del total, de las cuales 1.621 lo han sido por el uso del teléfono móvil.

Los conductores jóvenes suelen utilizar el teléfono móvil cuando conducen con mayor frecuencia que los conductores de mayor edad y son muy vulnerables a los efectos de la distracción, dada su poca experiencia al volante. El tipo de accidente más frecuente debido a la distracción es la salida de la vía, choque con el vehículo precedente o atropello.