El Ayuntamiento de Zaragoza pretende bonificar el recibo del IBI a aquellos comercios que se vean afectados por las obras en la vía pública. Esta es una de las propuestas en las que están trabajando en el área de Hacienda, que en los próximos días presentará su proyecto de ordenanzas fiscales para 2022 y que incluirá un plan especial para atraer empresas y fomentar la inversión y la creación de empleo.

Según ha podido saber este periódico, una de las más novedosas en la que trabajando el equipo de Gobierno de PP-Cs y que beneficiará de una forma directa a los pequeños comercios es la nueva bonificación del IBI en los recibos de aquellos comerciantes afectados por las obras impulsadas por el consistorio, como las reformas integrales de varias calles y avenidas que forman parte de la operación calles y que se ejecutarán el próximo año.

Desde el área de Hacienda contemplan que los bienes inmuebles destinados a los usos comerciales (de tipo general) puedan obtener una bonificación de la cuota integra del impuesto que se aplicará en la liquidación del año en el que finalicen las obras siempre que sean declarados «de especial interés o utilidad municipal». Se baraja que, en el caso de que los trabajos se prolonguen hasta los tres meses la rebaja sea del 25%, que ascendería al 50% si durasen entre tres y seis meses. Si el tiempo fuera mayor, de seis a nueve meses, la bonificación sería del 75% y si supera este tiempo, de hasta el 95%.

Beneficio para todos

Para que el comerciante pueda verse disfrutar de esta bonificación tendrá que solicitarla y, en el caso de que esté arrendado, el propietario podría disfrutar de esta ventaja siempre que el beneficio que obtenga repercuta de forma positiva en el inquilino, rebajando el precio del alquiler o adoptando alguna medida compensatoria. Además, podrán requerirla todos los comercios que tengan algún elemento de su local en la calle en la que se están ejecutando las obras.

Esta es la propuesta que están diseñando en el área que dirige María Navarro, que ahora se enfrenta a una dura negociación para poder aprobar las ordenanzas. En la comisión de Hacienda ya adelantó que el Gobierno de PP-Cs preveía aprobarlas en los próximos días el proyecto.

Otra de las novedades que incluirá el proyecto de PP-Cs será el plan de atracción fiscal, que afectará al IBI, IAE (Impuesto sobre Actividades Económicas) e ICIO (Impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras). El consistorio va a proponer bonificaciones dependiendo de la inversión de las empresas, de la creación de empleo e incluso de si decide adquirir suelo público para abrir su negocio.

Respecto al IBI, PP-Cs descartan subir los impuestos a las grandes empresas. «Los comercios y las empresas con un valor catastral de más de 1 millón han declarado pérdidas, como el sector hotelero. No podemos subirles los impuestos después de pandemia. Soy incapaz de bajar valores catastrales para subir los impuestos», declaró Navarro durante la comisión. Este año el consistorio ya ha recaudado 104,6 millones en este concepto y a 31 de agosto. En 2019, por esas fechas, la cifra fue de 105 millones, y el año pasado, en plena pandemia, de 101,7. Navarro también explicó que se van a actualizar los criterios de la plusvalía y los valores de referencia del ICIO.