Los grupos del Ayuntamiento de Zaragoza llegaron a un acuerdo en el debate sobre el estado de la ciudad: impulsar el proyecto de la reforma de La Romareda. En teoría se parte desde cero, con un «folio en blanco», aunque todos tienen sus preferencias. Las de Podemos se han conocido este martes. La formación morada ha puesto sobre la mesa dos posibilidades que hasta ahora no se contemplaban y que pasan por construir el nuevo estadio en el párking norte de la Expo o en Arcosur.

Para Podemos es una condición insalvable que haya una línea de alta capacidad que una los barrios con el futuro estadio de fútbol. Según el portavoz de la formación, Fernando Rivarés, la distancia mínima de este servicio de transporte público debería estar, como máximo, a 500 metros.

A día de hoy solo la actual ubicación del estadio lo garantiza, pero según el concejal, la construcción de un nuevo campo sería la opción «a priori, más económica y con más posibilidades» de que salga adelante frente a la reforma de unas instalaciones que sufren el deterioro del paso del tiempo.

El transporte público de alta capacidad será necesario si se quiere evitar el uso abusivo del «vehículo privado», ´ha señalado Rivarés, que ha añadido que para facilitar el acceso al estadio de aquellos que vengan a Zaragoza desde otra localidad a disfrutar de un partido, sería conveniente que se creasen aparcamientos disuasorios conectados a través de lanzaderas.

La opción más económica

Según el portavoz de la formación morada, construir una nueva Romareda en otro barrio sería más económico. Se haga como se haga, pone como condición que se descarte cualquier operación urbanística para afrontar la inversión. «Cualquier financiación procedente de la venta de suelo debe rechazarse, de manera explícita si se trata de utilizar suelos y equipamientos que no tengan que ver con el campo», ha recalcado Rivarés.

En el caso de que el ayuntamiento optase por la construcción de un nuevo campo, Podemos también pone límites. La venta de esos suelos, muy cotizados, permitirán financiar una parte muy importante de nuevo campo. Podemos lo sabe. Los suelos donde ahora se ubica La Romareda se venderían para construir vivienda. Pues bien, la formación morada no aprobará nada que no incluya «un porcentaje no inferior al 50% en vivienda pública de alquiler, un porcentaje no inferior al 20% en VPO precio básico y un porcentaje máximo del 30% en vivienda libre».

El Real Zaragoza

Desde el partido proponen que se siga el modelo de financiación del estadio de Mendizorroza de Vitoria. Siguiendo este ejemplo, el ayuntamiento tendría que asumir los costes del suelo, las licencias y las correspondientes tasas mientras que tanto el Gobierno de Aragón como la Diputación Provincial aportarían una parte de la inversión. Eso sí, según Rivarés, sería el Real Zaragoza el que «debería asumir la mayor parte».

Para el concejal, mientras el club no asuma este compromiso, no se podrá acometer este proyecto de ciudad, necesario para que Aragón pueda optar a los Juegos Olímpicos de invierno o al Mundial de 2030.

Esta es la propuesta de Podemos, que poco tiene que ver con la que barajan tanto el Gobierno de PP-Cs como el PSOE. El alcalde, Jorge Azcón, siempre ha defendido la opción de reformar el actual estadio, muy bien ubicado y con una parada del tranvía a las puertas. También que el consenso es esencial para que salga adelante un proyecto de esta magnitud, que requiere de la implicación económica del consistorio, el Gobierno de Aragón, la Diputación Provincial y el propio club, que no pasa por un buen momento económico.

El PSOE propuso retomar las negociaciones con una hoja en blanco, aunque es partidario de recuperar el proyecto que su formación presentó estando al frente de la Alcaldía, es decir, construir un nuevo estadio en el barrio de San José.

Podemos no lo descarta, aunque incluye nuevas localizaciones a debatir y estudiar, siempre que el equipo de Gobierno de PP-Cs lo vean conveniente. Hasta ahora, nunca se habían barajado.