Un total de 143 personas en situación de vulnerabilidad o en riesgo de exclusión social han participado a lo largo del este año 2021 en el Proyecto de promoción de la inclusión sociolaboral impulsado por el Ayuntamiento de Zaragoza en colaboración con Fundación Adunare y que ha sido clausurado este jueves por el concejal de Acción Social y Familia del Ayuntamiento de Zaragoza, Ángel Lorén, y la directora de Fundación Adunare, María Jesús Ruiz.

Todos ellos han recibido hoy los diplomas acreditativos. "Este es uno de los convenios más importantes del área de Acción Social del Ayuntamiento de Zaragoza: más de 425.000 euros destinados a las personas más vulnerables que, puestos en colaboración con entidades sociales como Fundación Adunare, se multiplica", ha asegurado Ángel Lorén. "La colaboración público-privada entre el Centros Municipal de Servicios Sociales del barrio Oliver y la Fundación Adunare es un ejemplo de cómo los servicios sociales deben estar al servicio de los ciudadanos y orientarlos al empleo es la manera de lograr la independencia y el acceso a los derechos sociales de las personas más vulnerables", ha añadido.

Como ha explicado la directora de la Fundación Adunare, María Jesús Ruiz, este programa persigue un doble objetivo: la mejora de la empleabilidad y la mejora del entorno del barrio, desde espacios públicos como jardines o colegios a viviendas del barrio. "El círculo de la intervención se cierra creando un barrio más amable y mejor, a la vez que se desestigmatiza a estas personas más desfavorecidas, con menos recursos, que son usuarios de servicios sociales... con respecto al resto de los vecinos", ha explicado.

143 personas, 4 líneas de actividad

El convenio de colaboración ha permitido la celebración de cuatro líneas de actividad centradas en el desarrollo de competencias básicas para población adulta; la mejora de la empleabilidad; la realización de prácticas formativas en las áreas de construcción y jardinería; y la inserción laboral en ámbitos de actuación de utilidad social. Es en esta última en la que 13 personas en situación de exclusión han contado con un contrato laboral durante seis meses en obras de construcción y jardinería, cuyas obras mejoran significativamente el entorno donde viven personas con escasos recursos.

Prácticas de jardinería en 48 colegios de Infantil y Primaria de la ciudad de Zaragoza o reparaciones en viviendas sociales y edificios municipales de diferentes barrios de la ciudad. Además, 13 jóvenes han realizado prácticas laborales en trabajos de albañilería y 26 en jardinería, desarrolladas en obras ligadas a necesidades sociales detectadas en hogares y espacios del barrio Oliver de Zaragoza.

En la línea de actuación orientada a la mejora de la empleabilidad se han combinado acciones de formación ocupacional con la celebración de un curso de limpieza de superficies y mobiliarios en oficinas y locales en el que han participado 11 personas. Por su parte, 24 participantes han seguido las sesiones de preparación de las pruebas de Competencias Clave N2.

Por otra parte, en el programa de formación se ha impartido español para inmigrantes a 17 personas y 23 han participado en acciones formativas de español y alfabetización. Además, 16 han mejorado sus competencias digitales y todos ellos han recibido orientación y acción comunitaria.