El 85% de la plantilla de la UTE Z+M, la concesionaria que controla las zonas de aparcamiento restringido, conocida como Zona Azul, en Zaragoza, ha secundado la convocatoria de huelga fijada para este viernes, ante la falta de avances en la renovación del convenio y la subida salarial que reclaman. El comité de empresa se plantea ahora llevar a cabo "otras medidas de presión".

Un grupo de trabajadores se han manifestado, además, este viernes, en la plaza de España, al igual que ya hicieran hace tan solo un mes. La presidenta del comité de empresa de la UTE Z+M -formada por Índigo y Mariano López Navarro-, Graciela Martín, ha lamentado la situación de "total bloqueo" en las negociaciones.

En declaraciones a Europa Press, Martín ha reprochado a Z+M "no haber dado ningún paso" después de la última reunión en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA), en la que "ni siquiera se quitaron los abrigos" y se marcharon "sin proponer nada".

Martín ha manifestado que las reivindicaciones de la plantilla son "principalmente salariales", dentro de la negociación del convenio laboral, caducado en 2020, y que han intentando acordar "durante todo el año pasado".

La presidenta del Comité ha puesto de relieve la distancia entre las posturas de empresa y trabajadores: "Nos ofrecen una subida del 0,50% para el 2021", algo que entienden "completamente insuficiente", dado que el año ha acabado con un IPC "mucho más alto", ha detallado Martín.

SUBIDA DEL IPC

La representante de los trabajadores ha explicado que desde la plantilla se reivindica un incremento que "iguale el IPC interanual o se sitúe lo más cerca posible", tanto respecto a 2021, como para 2022.

"Ante la actitud de la empresa, no nos quedó más remedio que convocar movilizaciones", ha aseverado Martín, quien ha recordado los paros parciales de 2,5 horas realizados los viernes de noviembre, así como las 2 jornadas de huelga -de este viernes y del pasado 7 de diciembre-.

En este sentido, ha anunciado una próxima reunión del comité de empresa en la que, de no producirse novedades por parte de la concesionaria, se planificarán nuevos paros y "otras medidas de presión", que no ha querido adelantar, aunque "ya hemos pensado algunas".

Graciela Martín se ha referido, igualmente, a la moción aprobada el pasado 22 de diciembre en el Ayuntamiento de Zaragoza, a propuesta del Grupo Socialista, que instaba al equipo de gobierno municipal a la búsqueda de soluciones "que lleven a algún resultado", aunque "hasta el momento no se ha dado".

Martín ha recordado que la contrata "ya ha caducado" y ha atribuido a esta circunstancia a que la empresa "tenga esta actitud tan indigna con la plantilla".