Hasta 50 edificios de Zaragoza, con 284 viviendas y 54 locales, serán rehabilitados de forma integral en los próximos tres años gracias a un programa de ayudas dirigido a actuaciones en materia energética, con obras de aislamiento térmico, de accesibilidad y conservación de las cubiertas y las fachadas. Los Gobiernos de España, Aragón y el ayuntamiento de la capital aportarán 2,3 millones de euros a las llamadas Áreas de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) en la ciudad, el 60% del coste de las obras. El resto correrá a cargo de los propietarios de los pisos (1,3 millones).
El Casco Histórico, Delicias y Las Fuentes son los barrios en los que se van a iniciar los trabajos en los próximos meses. El centro de la capital concentra el grueso de las actuaciones y de la inversión. En la zona de Pignatelli se van a reformar 20 inmuebles con 245 viviendas, mientras en el grupo sindical Andrea Casamayor de Las Fuentes, en la calle Pedro Cubero, se actuará en dos bloques con 20 pisos. En Delicias se rehabilitará un edificio con diez viviendas en la calle Castellote.
Ayudas en ocho municipios
Los ARRU se firmaron en firmaron con seis ayuntamientos de la comunidad aragonesa entre 2019 y 2020. Además de con el Zaragoza, también con el Alcañiz, Monzón, Huesca, Calatayud y Ejea de los Caballeros. Según ha explicado el consejero de Vivienda, Movilidad y Vertebración del Territorio, José Luis Soro, se van a destinar 22 millones de euros a estos proyectos de regeneración, de los que 12,5 serán aportados por las instituciones públicas, que financian en 60% de las obras. De este total, el Estado asume la mayor parte, el 66%, mientras que el gobierno autonómico y el consistorio ponen un 16% cada uno. Una cantidad que permitirá actuar en 888 viviendas en Aragón, que deberán lucir su aspecto renovado antes de que finalice el año 2025.
Mientras que en Zaragoza, la subvención va dirigida a la reforma integral de los edificios, en el resto de municipios se incluyen otro tipo de actuaciones, como el derribo y construcción de los inmuebles, debido a su mal estado, o a la reurbanización de los espacios más degradados.
Este proyecto de regeneración urbana no volverá a contemplarse como tal en el plan de vivienda y a partir de ahora se aprovecharán los fondos de recuperación de la Unión Europea para seguir actuando en las zonas más degradadas de los municipios.
El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza, Víctor Serrano, ha destacado, por su parte, el trabajo desarrollado por la sociedad Zaragoza Vivienda y el “efecto contagio” que tienen estas actuaciones y ha mostrado su confianza en que los fondos europeos permitan seguir adelante con la regeneración de los barrios más degradados. “Dentro de los 33 millones que le corresponden a Aragón, espero que Zaragoza ocupe la posición que le corresponde”, ha señalado.
