La Asociación de Vecinos Tomás Pelayo del barrio de Casablanca ha rendido un homenaje este domingo, 20 de febrero, a los "héroes" que defendieron Zaragoza durante la Guerra de la Independencia hasta su capitulación en este mismo día pero de 1809. Su presidente, Gonzalo Martínez Gracia, ha recordado "la gesta" de "nuestros antecesores", en la que participaron tanto hombres como mujeres en la resistencia activa o niños, llevando agua a los combatientes, según ha recordado durante el sencillo acto al que han acudido medio centenar de personas.

Este homenaje se realiza todos los años desde 1999, fecha en la que se colocó la placa conmemorativa de la paz firmada entre el mariscal Lannes, general de las tropas napoleónicas, y Pedro María Ric, presidente de la Junta de Defensa de Zaragoza, en la pared del molino de Casablanca, en el parque de los Incrédulos.

Martínez ha puesto en valor la resistencia de los zaragozanos ante el ejército napoleónico que, en esos momentos, estaba acostumbrado a arrasar a su paso en el campo de batalla. "Pensaban que conquistar Zaragoza iba a ser un paseo militar, pero no fue así", ha subrayado, haciendo hincapié en que "Zaragoza no se rindió de manera incondicional", sino que capituló, un acuerdo que "permite tener ciertas normas, aunque los franceses no las respetaron", ha recordado.

Placa conmemorativa de la capitulación de Zaragoza ÁNGEL DE CASTRO

El acto ha concluido con una actuación a cargo de miembros de la escuela folclórica Vientos de Aragón, que han interpretado varias jotas entre las que han destacado Los Sitios de Zaragoza y otra en recuerdo a los vecinos de Casablanca que hicieron frente a los franceses. En el acto ha estado presente Carmen Rouco, concejala de Vox en el distrito y Sergio Larraga y Jesús Martín, del PAR. 

Mayor participación

Desde 2014, la asociación se muestra muy reivindicativa con el cuidado de esta placa conmemorativa y su entorno. Tal es así que desde la asociación muestran su malestar por los continuos grafitis que aparecen en la propia tapia o incluso sobre dicho recuerdo.

Además, Martínez ha expresado también su deseo de que los jóvenes del barrio se implicaran de manera más activa en actos como el de este domingo o en otros de carácter cultural, como el Espacio Hidro-lógico ubicado en el propio molino y que reabrirá sus puertas el próximo 5 de marzo. Sin embargo, el presidente de esta asociación es consciente de las dificultades para lograrlo ya que para ello es necesario una "implicación y responsabilidad" de manera continua, algo que no siempre es posible "por falta de tiempo".

Miembros de la Escuela De Jota Vientos de Aragón, este domingo en Casablanca. ÁNGEL DE CASTRO