La Policía Nacional de Zaragoza han detenido a un hombre de 37 años, con numerosos antecedentes y que cumplía el tercer grado en la cárcel de Zuera, como presunto autor de 10 robos con violencia desde finales de 2021 en comercios del barrio Oliver en los que intimidaba con un cuchillo a los empleados para que le entregaran el dinero.
El Grupo de Robos con violencia o intimidación de la comisaría de Distrito Centro inició la investigación tras las denuncias de las víctimas, que aportaron descripciones físicas muy concretas que en todas ellas eran coincidentes.
La Jefatura Superior de Policía de Aragón destaca en un comunicado que tanto una empleadas de un establecimiento de frutos secos como una trabajadora de una farmacia ubicados en la calle Antonio Leyva y que han sufrido atracos en seis ocasiones en total, aseguraron que el autor coincidía y que les había robado en anteriores ocasiones.
El modus operandi era siempre el mismo: accedía a un establecimiento abierto al público cuando había pocos clientes con el rostro cubierto -con una braga de cuello o prendas con capucha- y se dirigía al empleado, que normalmente estaba solo, y esgrimiendo un cuchillo le intimidaba para que le entregasen el contenido de la caja registradora.
La zona de actuación era siempre el barrio Oliver, aunque en dos ocasiones los hechos se cometieron en el barrio de Miralbueno, en una zona que linda con Oliver y, de hecho, la huida del autor era en dirección a este último.
Tras las investigaciones y gestiones realizadas, los agentes identificar y detener al hombre, cuyas características físicas coincidían con las aportadas por las víctimas, este martes.
En el domicilio del detenido, con numerosos antecedentes policiales por hechos similares y que estaba en el momento de la comisión de los delitos cumpliendo una pena en régimen de tercer grado en el Centro Penitenciario de Zuera, se intervinieron numerosas prendas de vestir que coincidían con las que llevaba el autor en los citados robos, así como el cuchillo con el que habría intimidado a los empleados.
El detenido, horas después de ser puesto a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, quedó en libertad a la espera de juicio.
