La línea de atención telefónica de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Zaragoza ha cambiado su número al 900 700 107, más fácil de recordar que el anterior, que seguirá funcionando durante un tiempo de transición, e incorpora la posibilidad de solicitar cita con el profesional de referencia. El concejal de Acción Social y Familia, Ángel Lorén, acompañado por Álvaro Lizama, coordinador del servicio que presta actualmente la fundación DFA, han presentado este lunes en una rueda de prensa las novedades relativas a este número.

El nuevo número de atención telefónica se encargará de centralizar no solo el acceso a los quince centros municipales de Servicios Sociales, sino a otros recursos como la Casa de las Culturas, la unidad del Mayor y la de Atención a la Ciudadanía y Buenas Prácticas.

Además, los usuarios podrán programar una cita con su profesional de referencia llamando a este número de teléfono, un servicio de atención que, según el consistorio, vive un proceso de mejora que le ha llevado a iniciar su implantación en seis de los quince centros de la ciudad en las últimas semanas y que se extenderá al resto en las próximas.

Entre julio, cuando DFA pasó a encargarse del servicio, y agosto, sus doce trabajadores han atendido más de 20.000 llamadas, de las que unas 15.000 han sido “válidas” y atendidas de manera directa, mientras que 1.500 se quedaron en el buzón de voz y, posteriormente, fueron devueltas, según ha informado Lizama.

El resto son llamadas descartadas por abandono del emisor o por otros motivos como equivocación o ausencia de interlocución.

Lorén ha destacado la atención “absolutamente personalizada” de este servicio del que, actualmente, ya se disponen de datos, algo que en el pasado no sucedía, lo que permite al consistorio conocer cuestiones como los usuarios que llaman, los que lo hacen en segunda instancia o el cauce de cada una de las atenciones.

Además, ha subrayado que el servicio no está atendido por una “inteligencia artificial”, sino por la docena de personas con discapacidad que conforman la plantilla y que “no solo conocen los servicios municipales”, sino que también están familiarizados con otros recursos autonómicos, por lo que pueden canalizar las dudas concernientes a estos servicios.

Lizama ha relatado que todos estos trabajadores cuentan “con una dilatada experiencia en funciones de comunicación y atención a la ciudadanía” y pueden ofrecer atención en idiomas como el inglés, el francés, el árabe o el rumano.

La central telefónica atiende en horario de lunes a viernes de 08.00 a 16.00 horas y recoge en un buzón de voz el resto de las llamadas, que posteriormente son contactadas; a partir de ahí, se gestionan las citas y se deriva la atención a los centros municipales de Servicios Sociales.

Entre las mejoras en el servicio, también se ha incluido la accesibilidad para personas con deficiencias auditivas o del habla mediante una plataforma de video-interpretación, tanto en lengua de signos como por lectura labial o chat.