Calles donde apenas hay árboles, que están puestos a una gran distancia unos de otros, de un porte muy pequeño, ornamentales y exóticos que apenas serán refugios de sombra y en casi todas ellas faltan parterres que unan los árboles, surtidores de agua y alguna fuente donde refrescarse frente a las olas de calor que se avecinan. De ser el árbol el que aporta la calidad y el confort al espacio aportando mejoras climáticas y reducción de contaminantes, lo que prima en las renovaciones es el asfalto puro y duro.

Los ejemplos más extremos son el de la calle Sixto Celorrio, que desde el puente de Piedra donde se inicia hasta la plaza San Gregorio donde termina, sólo han colocado cinco árboles. La calle San Miguel donde solo han colocado cuatro maceteros y dos pequeños arbustos. La prolongación de Tener Fleta metiendo una autopista en el barrio. Ningún árbol, cuando el espacio permitía un tránsito de paseo peatonal muy amplio. La plaza de los colores de Miguel Servet de 4.200 metros cuadrados donde falta el verde natural de los árboles. Pero no es mucho mejor Latassa, Cuarte, Predicadores. La imagen que ofrecen estas calles es cemento y más cemento. Los mejores ejemplos son la avenida Navarra y la calle Ricla pero en esta última se talaron, sin necesidad, árboles de más de 40 años de edad.

¿Renovación de las plazas?

En la plaza de Salamero no era necesario haber eliminado nada de vegetación porque sobra el parking, como se ha demostrado con años cerrado por las obras. Es más este parking, deja muy lejano el poder extender la zona de bajas emisiones que resolvería graves problemas de salud y que ahora solo se contempla en un espacio minúsculo en el interior del casco histórico.

El resultado ha sido un bosque de estructuras colgantes y una gran losa de cemento, que aparte de su elevado presupuesto, está lejos de ofrecer naturaleza y verdor natural que no van a mitigar las elevadas temperaturas del verano. Es una repetición de la plaza de Santa Engracia pero multiplicada por cinco en extensión. La mejor parte de la plaza es donde se han replantado tres olivos.

Y en la plaza de La Magdalena se colocan solo dos bancos por no contribuir , según el Gobierno municipal, a la proliferación de mendigos y personal relacionado con la droga. Inaudito. La ciudad de las plazas arboladas no se ha conseguido con las actuaciones llevadas a cabo

¿Y el paseo de Sagasta?

Se eliminan el metro y medio de seto que aislaban del ruido, de la contaminación y de la visual del tráfico rodado en las calzadas del paseo y se colocan unas plantas, en su mayoría exóticas, que no levantan 30 centímetros del suelo y que podrán ofrecer floración en primavera, pero a costa de eliminar la floración del azahar que componían los setos eliminados. No solo eso. Se han plantado pequeñas matas de azahar, dónde antes había estas mismas plantas pero de metro y medio de altura. No tiene mucho sentido. Y decir que han aumentado los espacios de sombra con la renovación del paseo es contravenir lo que todo el mundo puede percibir.

En el parque Pignatelli toda una banda de parterre de norte a sur del parque se han habilitado con flores y en donde hay notables pinos carrascos, pero al estar dotados de riego, ponen en peligro la seguridad de estos grandes pinos. Y ya con la ampliación del parque, se han trazado dos grandes avenidas de 20 metros de anchura. ¿Para realizar grandes desfiles? Todo lo contrario de paseos con gran arbolado ya que los de gran porte apenas se han plantado. Los visitantes se refugiarán, o en el lago, o seguirán acudiendo al viejo parque donde hay amplias zonas de sombra.

Alcorques en Torrero

En dos días el barrio de Venecia apareció en el mes de febrero pasado, con 134 alcorques con cemento. Solo las protestas de los vecinos y un pasacalles reinvindicativo de mas de 500 personas ha conseguido «indultar» a más de 100 de ellos que esperan su renovación arbórea para el próximo otoño. Decena de miles de euros malgastados.

Y seguimos sin entender que se ha querido hacer con el jardín japonés próximo al parque de la Paz. Decenas de árboles secos, un año de obras y el vecindario se pregunta que objetivo tienen dos bancos colocados, un vallado circular y nadie, nadie que lo visite.

Positivo que se planten los alcorques vacíos, pero lo sería mucho más si la gran mayoría fueran replantados con especies autóctonas. Las especies elegidas, son en su mayoría, un tipo de peral y jabonero, ambos, originarios de China. Son muy invasivos y desplazan a los autóctonos. Pensar que los insectos y pájaros locales se adaptaran a estas especies, es mucho suponer.

No se predica con el ejemplo

En boca de Natalia Chueca y responsables de Parques y Jardines se habla constantemente de renaturalizar la ciudad. Y para ello, se les ocurre regalar a los comercios del centro unas plantas de plástico que han tenido una vida efímera o bien unos arcos de flores, también de plástico que remarcan, entre otros, la estatua de Cesar Augusto en la Murallas romanas. La corona de laurel sustituida por el plástico. Señalar, que al pequeño comercio se le apoya mucho más, no aprobando grandes superficies como la nueva que se pretende en el entorno de La Romareda más que con plantas de plásticos y pequeños sombreados como el realizado en la calle Delicias.

Y se sigue , contrario a esta finalidad de renaturalizar la ciudad, pasando este febrero pasado, la cortadora de césped en las orillas del Ebro, en el tramo del Huerva desde la entrada del Parque Grande hasta el Rincón de Goya y en las laderas del Cabezo Buenavista hasta el Canal y el propio Parque. Otra de las ocurrencias ha sido sustituir una plantación de cerezos que la Asociación cultural Hispano Japonesa había desarrollando en estos últimos años por un pipican.

Parque de Plaza

Desde el aeropuerto, pasando por el parque de Plaza, el segundo en extensión de Zaragoza, pasando por los huertos urbanos y por campos del Canal tenemos decenas de has de zonas verdes de varios kilómetros de longitud. Es, con el Parque de Labordeta, la zona verde más extensa de Zaragoza.

El coste de mantenimiento de estas áreas ajardinadas es muy elevado pues incluso los campos del Canal es una zona de árboles que requiere riego por goteo bombeando agua del Canal Imperial. Estas inversiones no han aprovechado por un lado la cercanía de la acequia de la Almotilla que hubiera tenido el aliciente de recuperar un antiguo camino de agua en la ciudad y por otro lado, que en su desarrollo se eliminó el mantillo del suelo agrícola anterior. Hay muchos carteles de grandes empresas que han colaborado económicamente en su plantación. En bastantes casos es un lavado de imagen que la propia Comunidad Europea está denunciando por ejemplos similares.

En el caso del parque de Plaza hay grandes praderas verdes, que fuera de los fines de semana, es pasto para cientos de conejos que tienen sus madrigueras en el soto próximo al Canal. El autobús del aeropuerto y la línea 41 permiten el acceso a estas áreas pero no hay una campaña de divulgación y puesta en valor para la ciudadanía de estos espacios. Y renaturalizar supondría que estos mantenimientos permitiesen el cambio de color de las praderas con las sucesivas estaciones a unos costes mucho más económicos. Incluso reforestando las praderas del parque de Plaza.

Conservar lo que tenemos

Parques y Jardines ha elevado sus presupuestos en un 50% superando los 26 millones de euros en esta legislatura municipal. Para compensar, las partidas de Educación Ambiental las han reducido a la mitad. Todo ello no ha supuesto una mejora en el cuidado de los árboles singulares de la ciudad. Se siguen muriendo y sus troncos no se conservan modelándose con esculturas como se hizo con el almez del parque Bruil. El último en morir ha sido el chopo contiguo a las tapias del campo de fútbol del Montecarlo.

La sociedad municipal de Ecociudad en vez de dedicarse al 100% de las múltiples necesidades del saneamiento, se le ha dedicado a renovar las calles de nuestra ciudad.

Y por último, la conservación de nuestros sotos no tienen los presupuestos debidos. ¿Cómo realizar la fotosíntesis cientos y cientos de árboles con kilos de toallitas colgadas de sus ramas? ¿Para que sirven 74 millones de euros en limpieza y gestión de residuos anuales cuando además tenemos las zonas periurbanas llenas de estos residuos? Y el plan de la Estepa , nuestro ecosistema más extenso y genuino, duerme el sueño de los justos.

Señalar que la extensión del bosque de los zaragozanos en el campo de San Gregorio, está llevando a la perdida de hábitat del rocin o alondra de dupont, ave en peligro de extinción. ¿Lo saben las personas que van a plantar que están ocasionando este destrozo?

Recuperación del Huerva

Desde que se planteó hace ya ocho meses aún no conocemos un documento escrito donde se concreten las medidas que se van a realizar. Lo que se expone en la página web del ayuntamiento es tan generalista que lo que se indica río servir también para el río Manzanares de Madrid. Y además prometen que la inversión va a depender del proyecto de la Romareda . Nos venden un proyecto en el que todo, dineros y fines a conseguir, están todo en el aire.

Arborizar los barrios

Desde nuestro punto de vista, dar sombra a nuestras calles es una prioridad absoluta además de naturalizarlas. Hay calles amplias en nuestros barrios desprovistas de vegetación. Proponemos que cada dos aparcamientos , un tercero se ocupe con un árbol de gran porte.

Refugios climáticos

En una situación de emergencia climática, con grandes subidas de temperatura especialmente en verano mucho más largos de los que hemos tenido hasta ahora, es necesario que en nuestros barrios haya refugios climáticos. En ciudades próximas como Bilbao, Barcelona y Vitoria ya se están llevando a cabo

Además de centros cívicos con sus cafeterías, bibliotecas, salas de estar... se tienen que habilitar más espacios climatizados aprovechando incluso centros escolares con alguna aula climatizada. Ofrecerán descanso, temperaturas de no más de 26 grados y agua potable. Las personas vulnerables deben disponer de «itinerarios confortables» para acceder a ellos, lo que implica rutas adecuadas, ver si tienen sombra, pendientes moderadas. Porque las elevadas temperaturas --sobre todo de los más vulnerables--, hace muy difícil la vida laboral y económica, empeora la salud física y mental y , hace la vida en general casi insufrible.

Las políticas desarrolladas en la remodelación de calles y plazas llevadas en estos años en Zaragoza, no cumplan con esta finalidad. El próximo gobierno municipal tendría que variar 180 grados en esta política que pensamos ha sido completamente errónea. Y eso si, a los juegos florales que se anuncian para Mayo acudirán decenas de miles de personas. Puro marketin que no resuelve grandes problemas de esta ciudad.

Mariano Mérida, Asociación Naturalista de Aragón