MOVILIDAD URBANA

Reby sigue sin devolver los saldos de sus usuarios en Zaragoza tras su marcha

La compañía empezó a retirar sus patinetes y en marzo el consistorio le revocó la licencia. Hubo clientes de la firma que todavía tenían dinero en la ‘app’ que ahora no pueden usar

Azcón probando una de las motos de Reby el día que llegaron.

Azcón probando una de las motos de Reby el día que llegaron. / EL PERIÓDICO

Iván Trigo

Iván Trigo

La empresa Reby sigue teniendo saldos pendientes con sus clientes en Zaragoza. Aunque se trate de un número indeterminado de casos, hay casos en los que la deuda de la compañía con los usuarios asciende hasta los 26 euros. Estas cantidades provienen del dinero que los particulares depositaban en un depósito del que se iban detrayendo cantidades cada vez que se hacía uso de uno de los vehículos de esta firma en la ciudad, que llegó a operar con bicis, motos y patinetes a la vez. Desde hace dos meses Reby ya no opera en la capital aragonesa.

Fue el pasado mes de marzo cuando el Ayuntamiento de Zaragoza revocó a Reby la autorización para la explotación en la vía pública de 600 patinetes tras haberle sido adjudicada esta licencia en junio de 2022. Desde el área de Servicios Públicos y Movilidad informaron entonces de que Reby estaba incumpliendo las condiciones pactadas en la concesión de la licencia, que incluían el despliegue de 600 patinetes en los seis meses posteriores a la adjudicación del permiso. Sin embargo, las sucesivas inspecciones realizadas por los técnicos municipales constataron que nunca llegaron a tener esos 600 vehículos en la calle.

Aunque la empresa fue requerida en varias ocasiones para que alegara sobre esta circunstancia, no hubo respuesta, y es que desde finales del año pasado Reby está inmersa en una crisis derivada del intento de compra por parte de otra compañía.

Antes de la revocación del contrato ya habían comenzado a desaparecer los vehículos de Reby de la ciudad y cuando se produjo su marcha definitiva, hubo usuarios que todavía tenían dinero metido en la app.

Según ha podido saber este diario, el intento de contactar con Reby a través de diferentes medios de los afectados ha sido infructuoso. Nadie coge el teléfono ni tampoco nadie responde al chat habilitado en la propia aplicación móvil.

Desde el ayuntamiento explican que, al no tratarse de un servicio público, no tienen acceso a las cuentas de la compañía, pero que sí que le han requerido a Reby en varias ocasiones la devolución de los saldos sin usar de los usuarios.

Fuentes municipales aclaran también que «no es una prioridad» sustituir a Reby por otra empresa de patinetes a la que conceder una nueva licencia, ya que la demanda ha caído al haber optado mucha gente por comprarse sus propios vehículos. El empeño del ayuntamiento pasa por renovar el Bizi