Más de 10.100 familias se han visto obligadas a recurrir al Ayuntamiento de Zaragoza para poder hacer frente a los gastos ordinarios del día a día, como la compra, el pago de las facturas de la luz y el gas o el comedor escolar. Una cruda realidad que, pese a la tímida mejora de la situación económica, cada día afecta a más hogares. En el caso de la capital aragonesa, el consistorio ha atendido en la primera mitad del año a más familias que durante el mismo periodo del año pasado, hasta un 12,10% más.

Los servicios sociales municipales han recibido en los cinco primeros meses del año 20.235 solicitudes de ayuda de urgencia, de las que prácticamente todas se han concedido. Supone un incremento del 10% respecto al pasado ejercicio, con un aumento notable en el mes de mayo.

Pese a que España ha resistido mejor de lo que se auguró tras la pandemia y el inicio de la guerra de Ucrania, la inflación --ahora en niveles de hace dos años en Aragón-- ha tenido duras consecuencias en demasiados hogares que se ven obligados a recurrir a las ayudas públicas para poder salir adelante y llegar a final de mes.

Hacer la compra ahora es mucho más costoso y comer sano no resulta nada barato, por lo que las ayudas para poder llenar la nevera son las más demandadas en el consistorio zaragozano. Suponen el 71,05% del total de las peticiones registrada en los servicios municipales y el 59,54% del importe concedido.

15 millones en ayudas

El ayuntamiento presupuestó para este año 15 millones de euros en ayudas urgentes, y ya se ha ejecutado el 41% del total. Preocupa especialmente que cada vez son más las familias que recurren a esta alternativa, hasta 10.191 en lo que va de año, frente a las 9.021 del año pasado por estas mismas fechas. Además, hay 695 expedientes en los centros municipales que superan las cuatro tipologías de ayudas, más que hace un año.

Yendo al detalle, en los primeros cinco meses del año se han solicitado 15.658 ayudas para poder hacer la compra, 2.000 más que hace un año. El importe medio es de 258,92 euros, unos 30 euros más que en 2022.

En este caso, el consistorio ofrece unas tarjetas con saldo para poder comprar una serie de artículos en los supermercados elegidos. De esta manera no se estigmatiza ni se señala a la familia afectada.

El pago de la luz y el gas

A diferencia de lo que sucedió el año pasado, cuando se dispararon las peticiones de ayudas para poder pagar las facturas de la luz y el gas, este ejercicio se han reducido notablemente, en paralelo a la evolución de los precios del mercado.

Tan solo representan el 3,41% del total de las tramitadas y el ayuntamiento ha pasado de recibir un aluvión de peticiones, hasta 1.077 en los primeros cinco meses de 2022, a las 752 en 2023. La cuantía para estas ayudas es de 195,56 euros. Las que sí van in crescendo son las destinadas al pago del comedor escolar, aunque su volumen es menor. En lo que va de año se han atendido 579 solicitudes, un 10% más que hace tan solo un año, y el importe medio es de 312 euros.

El pago del alquiler

El pago del alquiler supone el 23% de la partida destinada a ayudas urgentes del ayuntamiento zaragozano. Este año ya la han solicitado 3.009 familias, una cifra muy similar a la que se registró el año pasado durante los mismos meses. El consistorio abona por cada ayuda 570,27 euros para hacer frente al alquiler.

Si se analiza el lugar de residencia de los solicitantes se constata que la pobreza también va por barrios. Como es habitual, el Casco Histórico y Delicias concentran hasta el 35% de la demanda total, seguidos del Oliver (11%), San José (9%) y Las Fuentes (6%). Se trata de zonas consolidadas en la capital con un porcentaje de población envejecida y migrante elevado.