Sentimientos encontrados por la celebración de San Fermín en Zaragoza

El inicio de San Fermín se ha vivido de forma especial a escasos 200 kilómetros de la plaza del Ayuntamiento de Pamplona. Los navarros afincados en Zaragoza se han reunido este jueves para disfrutar de una festividad muy especial para ellos. Hasta la capital de Aragón han llegado los llegaron los vivas y goras de todos estos navarros que siguen teniendo a su tierra en el corazón.

La cafetería El Pájaro Azul se ha convertido, una vez más, en la plaza del Ayuntamiento de Pamplona en la que más de 25.000 personas han disfrutado de un momento de alegría con el lanzamiento del chupinazo. En Zaragoza se ha vivido de distinta manera, pero con el mismo sentimiento de pertenencia a una tierra en la que ya no viven desde hace tiempo. Cuando el cohete ha retumbado en la capital de Navarra, en el interior de la cafetería se han vivido momentos de felicidad y los bailes han tardado poco en llegar.

Ana Notivoli, la presidenta de la Casa de Navarra en Zaragoza, ha sido la anfitriona de esta festividad en la que no cabía ni un alfiler. "Teníamos muchas ganas de juntarnos y celebrar unos sanfermines así. Se te ponen los pelos como escarpias y sientes una emoción difícil de describir", destacó esta mujer que lleva 50 años viviendo en Zaragoza. Tras el lanzamiento del cohete, los asistentes a la cita pudieron disfrutar de una buena charanga donde se comenzaron a formar los primeros corros de la mañana.

Y lo que tampoco podía faltar era un buen almuerzo sanferminero con chistorra de Navarra, una ensalada ilustrada con productos de la huerta de la Ribera, como los cogollos de Tudela, y una tarta horneada en Pamplona. La música no pudo faltar a la cita y una charanga fue la encargada de amenizar la velada.

Chupinazo, vermut y charanga por el inicio de San Fermín en Zaragoza

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Notivoli ha vidido este chupinazo "con nostalgia y con un sentimiento especial porque los Sanfermines son únicos y unas de las mejores fiestas del mundo", tal y como ha comentado. Para la presidenta este momento es único y algo irrepetible a lo largo de todo el año. "Yo soy pamplonica de corazón pero de nacimiento soy de Tudela. Siento todo lo que puede sentir un navarro que está lejos de su tierra. Yo soy navarra de la punta del pelo a la de los pies", ha afirmado con un rostro donde se reflejaba su emoción.

Junto a ella han estado presentes decenas de personas y todos han llegado a la misma conclusión: esta celebración ha sido la más multitudinaria en comparación con otros años. "En otras ocasiones estabamos 5 o 6 personas, pero lo de este año ha sido una pasada", ha afirmado una de las personas desplazas hasta el número 8 de la calle Doctor Cerrada. La festividad acaba de comenzar y todavía queda por delante días de celebrar, reír y disfrutar junto a familiares y amigos. Mañana todos los navarros afincados en la capital aragonesa tienen también una cita en la catedral basílica del Pilar de Zaragoza en honor al patrón de Navarra a partir de las 20.00 horas.