Natalia Chueca consolida su proyecto electoral en sus primeros presupuestos para Zaragoza

Sin grandes sorpresas pero sin grandes ausencias. Así podría describirse el proyecto de presupuestos presentado este miércoles con pompa y boato por la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, quien estuvo acompañada por el portavoz de Vox, Julio Calvo –a pesar de no formar parte del equipo de Gobierno–, y por la responsable de Hacienda, Blanca Solans. Las grandes cifras abruman, pero en los detalles están los matices de un proyecto político, el de la regidora, que debe cumplir con las expectativas generadas –obtuvo 15 concejales, a uno de la mayoría absoluta– sin renunciar a la herencia de Jorge Azcón.

El presupuesto de 2024 ascenderá hasta los 950.020.790 euros, un 6,11% más que en 2023, alcanzado así una cifra récord aupada por los fondos europeos y el aumento de las aportaciones del Estado y la comunidad autónoma al ayuntamiento. Debido a esto, Chueca dispondrá de 108,3 millones de euros para invertir en infraestructuras, que al fin y al cabo es lo que todo ciudadano de a pie puede ver y juzgar de la gestión de una alcaldesa.

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Esos casi 110 millones de euros en inversiones son una cifra que no se veía en Zaragoza desde hace 15 años, cuando la Expo y la burbuja inmobiliaria hincharon las arcas municipales para después dejarlas temblando.

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Del total de las inversiones, 88,4 millones serán ejecutadas por las diferentes áreas del Gobierno municipal y, el resto, 19,9 millones, por las sociedades municipales como Zaragoza Vivienda, Zaragoza Deporte y Ecociudad.

A estas cantidades hay que añadir los más de 30 millones que se incorporarán a las cuentas procedentes de fondos europeos, una cantidad que servirá para financiar proyectos ya anunciados como la restauración de la celda del Prior de La Cartuja, la torre de Santa Engracia y la compra de autobuses eléctricos, entre otros.

Los tres grandes proyectos

Y tres son las grandes apuestas que se consolidarán en el presupuesto de 2024, a pesar de que las aportaciones económicas, en algunos casos, no son significativas. La Romareda, la recuperación de las riberas del Huerva y la Ciudad del Deporte, promesas electorales por excelencia, tienen partidas consignadas en el proyecto de las cuentas.

En el nuevo estadio de fútbol, el ayuntamiento aportará a la sociedad mercantil encargada de su construcción tres millones de euros, que se sumarán a los 24,5 millones que ha puesto el consistorio en concepto del valor de los suelos. Faltarán, por tanto, 12,5 hasta llegar a los 40 que comprometió Chueca de aportación municipal.

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Para el río Huerva, después de largos meses de anuncios, recreaciones y power points, el 2024 será su año. El Gobierno municipal del PP ha proyectado invertir 10 millones de euros en la regeneración de las riberas, de los que 5 los pone el Ejecutivo autonómico a través de Ecociudad. Eso sí, el proyecto de regeneración está valorado en su conjunto en casi 30 millones, por lo que el esfuerzo inversor deberá mantenerse en el tiempo para terminar las obras. 15 de los que faltan los pondrá la DGA.

En el caso de la Ciudad del Deporte, el compromiso del PP es más difuso a pesar del entusiasmo que muestran la alcaldesa y su equipo de Gobierno. Para 2024 se han consignado 200.000 euros que servirán para redactar el anteproyecto del recinto, que incluirá un miniestadio de fútbol para 4.500 espectadores, un «centro acuático» con piscina olímpica cubierta, residencia de deportistas, pabellón polideportivo para competiciones internacionales y espacios para deportes de sala.

No obstante, estos 200.000 euros son menos de lo que el Gobierno municipal del PP presupuestó en las cuentas de este año. Fueron entonces 225.000 euros que no se han gastado. Eso sí, Chueca ha comprometido una inversión de 2025 hasta 2030 de 50 millones de euros, –ahí es nada– para hacer realidad una de sus promesas electorales y que tomó prestada de Podemos.

Nuevos equipamientos que verán la luz

El año que viene regresan al presupuesto pero para hacerse por fin realidad otras iniciativas como la reforma del albergue municipal (2.267.000 millones en 2024 y 2.500.000 en 2025), la construcción del centro cívico de Vía Hispanidad, que debe comenzar a mitad de año; la redacción del proyecto de la escuela infantil de Arcosur; el diseño de las piscinas de Valdespartera; la reconversión en centro cívico del antiguo Luis Buñuel y la culminación de las obras en la Casa Amparo.

Entre el listado de partidas están también la ampliación del centro cívico Delicias con la reforma de la antigua marisquería, un proyecto que ya se intentó en el pasado; o la redacción del proyecto de Parque Goya, que pierde, eso sí, 420.000 euros de las cuentas de 2023 a 2024, quedándose con 80.000 euros. La operación de renovación de calles y avenidas continuará con la segunda fase de la avenida Navarra y la avenida Cataluña y la reforma de la calles Manifestación, Gil Morlanes y Matadero. Si bien, se dejan para más adelante otras vías que ya anunció Azcón, como la avenida Valencia y el Coso, aunque este año podrían redactarse ya los proyectos de obra.

En las cuentas se mantiene el programa Volveremos, con 5,1 millones, la implantación del nuevo sistema Bizi, con 2,2 millones, la reconversión de la antigua cárcel de Torrero (50.000 euros) y se incorporan 1,1 millones para mejorar la seguridad en el Barranco de la Muerte en caso de lluvias torrenciales y 300.000 euros para estudiar y proyectar una comisaría en el Casco Histórico, en la zona del Gancho, una petición vecinal exigida por Vox.

En estas cuentas, eso sí, pierde la antigua fábrica de Giesa. Desaparecen 98.000 euros de los presupuestos para su rehabilitación y se queda solo con 2.000 euros.

Asociaciones antiabortistas y la promoción taurina

Además, la ultraderecha ha conseguido colar en las cuentas convenios con asociaciones antiabortistas como Red Madre (50.000 euros) y programas «de atención a la mujer embarazada» (80.000 euros) y apoyo a la maternidad (50.000 euros), entre otras ayudas de «apoyo a las familias». Vox también ha logrado reflejar en las cuentas un plan de promoción taurina (25.000 euros), una línea de apoyo a autónomos y micropymes (1,3 millones de euros), la mejora del aparcamiento de la calle Embarcadero (200.000 euros), un estudio para eliminar carriles limitados a 30 kilómetros por hora (20.000 euros) e inversiones en los barrios, los polígonos industriales y las fuentes y el mobiliario de la ciudad y los parques.

«Estas cuentas son como la cuadratura del círculo y demuestran que se pueden mejorar los servicios públicos y la protección de los vulnerables bajando impuestos. El apocalipsis anunciado por la izquierda nunca ha llegado», defendió Chueca. Por su parte, Julio Calvo afirmó que, «no son las cuentas que le hubiera gustado presentar al PP ni tampoco las que hubiera proyectado Vox», pero destacó que el acuerdo es «positivo para la ciudad». Según ambos, en el proceso negociador «no ha habido grandes cesiones» por ninguna de las dos partes. El viernes se aprobará el calendario de tramitación de las cuentas, que deberían entrar en vigor a mediados de febrero.