La nueva Romareda costará 14 millones menos de lo previsto

La construcción de la nueva Romareda costará 14 millones de euros menos de lo esperado. Según ha podido adelantar este diario, la sociedad adjudicataria será la UTE (unión temporal de empresas) formada por OHL y Altuna y Uria, que han ofertado 124,5 millones en un contrato que se licitó por una cantidad máxima de 138,5 (sin IVA, que es deducible). Así pues, el futuro estadio tendrá un importante ahorro económico de más de un 10% que, además, permitirá afrontar mejor otras operaciones simultáneas como la del Parking Norte, adjudicada a MLN y Nussli por 12,7 millones de euros.

Las otras dos ofertas que se habían presentado, tras caerse Ferrovial, eran las UTE formadas por dos filiales de FCC (que ha ofertado algo menos de 136 millones) y por Constructora San José y Copasa (unos 129,5 millones). La tarea que ahora tendrá que desarrollar OHL y Altuna y Uria consistirá en el derribo de lo que queda del estadio (ya se ha derribado el Gol Sur) y su completa reconstrucción, que deberá estar lista para agosto de 2027 y que, del mismo modo, empezará por la grada sur. Curiosamente, OHL (junto a Deltapunt) también está siendo la encargada de ejecutar la primera fase de la obra, en la que ya ofrecieron una baja de un millón de euros (de 4,1 que estaban licitados a 3,1).

La confirmación, en cualquier caso, llegará este viernes, tal y como anunció desde Madrid el pasado miércoles la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca. La oferta de OHL y Altuna y Uria pasará por el consejo de la sociedad mixta Nueva Romareda, presidida por Chueca y de la que forman parte Ayuntamiento de Zaragoza y DGA (75% entre las dos instituciones) y el Real Zaragoza, que posee un 25% del capital social tras la última reestructuración.

Y es que, hace poco más de un mes, Chueca anunció que, para poder garantizar la viabilidad financiera de la operación, tanto el Gobierno de Aragón como el consistorio zaragozano tendrían que aportar 72 millones más de dinero público. Hasta ahora, el global de la operación, incluyendo el traslado al Parking Norte, estaba cifrada en 169 millones de euros, cifra que se ve sensiblemente reducida gracias a la adjudicación del contrato base de todo el proyecto, que en un principio se licitó por 138,5 millones y que se ejecutará por unos 124,5. Por tanto, ahora quedan por sacar a concurso tres contratos menores, que suman unos 10 millones de euros, y que deberán adjudicarse para el nuevo césped, la tecnología y los asientos. Contratos que, eso sí, no se licitarán hasta 2026, cuando la obra ya encare su recta final.

Plazos

Cabe recordar que los plazos se acortaron gracias a la decisión de mudarse temporalmente al Parking Norte. Esta opción, contada por EL PERIÓDICO DE ARAGÓN y que empezó a estar sobre la mesa a comienzos de año, presentaba muchas ventajas, como el llegar más desahogados al Mundial de 2030, no acompasar las obras con el desarrollo de la competición o, como siempre defendió la sociedad mixta una vez se confirmó el traslado, un ahorro que también podría ser económico. Una variable que ahora se cumple.

Pero lo esencial de esta última circunstancia era el ahorro de tiempo, permitiendo que la nueva Romareda, diseñada por IDOM, estuviese lista un par de años antes de la idea inicial. Gracias a la mudanza al Actur, las obras en el estadio se harán de golpe, y no por fases. En ese sentido, la intención era derribar y reconstruir cada año una grada, como sucede ahora con el Gol Sur, que de hecho deberá estar construido antes de que acabe la presente temporada, antes del próximo verano.

Para entonces, el estadio modular del Parking Norte ya deberá estar prácticamente concluido, ya que la fecha de entrega de las obra es entre finales de mayo y principios de junio. En este caso, las máquinas llegarán a comienzos del próximo año a los terrenos de la Expo, que primero serán acondicionados.

En marzo, como avanzó este diario, comenzará el montaje del esqueleto del campo provisional, que podría estar listo en cerca de mes y medio. Luego restará completar otras infraestructuras como el edificio colindante (destinado a vestuarios, entre otras cosas) y rematar la adecuación de todo su entorno. Desde la sociedad Nueva Romareda se trabaja por poder dotarlo con un naming (como sucederá con el estadio principal) y así ganar ingresos extra. Además, el estadio modular se probará antes de la próxima Liga con uno o varios amistosos.