Dos cadenas de comida rápida darán vida al antiguo almacén de Galerías Primero en la avenida Cataluña de Zaragoza

La regeneración y metamorfosis de la avenida Cataluña de Zaragoza incorpora nuevos alicientes. Una parte de lo que fueron los almacenes de Galerías Primero y, posteriormente, de El Árbol, ha empezado a demolerse para crear un nuevo espacio comercial en una de las zonas de la ciudad con mayor desarrollo inmobiliario en estos momentos. Esta semana se han iniciado las obras para echar abajo una nave de 2.300 metros cuadrados, un anticipo del «proceso de transformación» que la propiedad de este activo quiere dar al antiguo centro logístico de Cogullada, que abastecía a los supermercados de las cadenas ya desaparecidas. Allí abrirán ahora un nuevo Burguer King y un Popeyes Lousiana Chicken.

El complejo, que alcanza los 17.000 metros cuadrados, lleva huérfano una larga temporada. Pero esto va a cambiar en pocos meses, al menos en uno de sus costados. Sobre estos suelos se levantarán varios locales destinados al alquiler donde está confirmada ya la presencia de esas dos conocidas marcas de comida rápida, según la información recabada por este diario de varias fuentes conocedoras de la operación.

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Allí tenía su cuartel general la emblemática Galerías Primero, fundada por el empresario Plácido Muñoz —fallecido en 2009—, que fue comprada en 2009 por El Árbol y esta a su vez por el Grupo Dia en 2014. La reconversión del inmueble industrial está promovida precisamente por la familia de la desaparecida enseña comercial aragonesa a través de la sociedad Maplan SA. La nave de Cogullada es «un inmueble muy significativo» para la familia Muñoz Fraile, «fruto del esfuerzo realizado en su día por Plácido Muñoz y su esposa María-Pilar Fraile», señalaron a este diario fuentes de la propiedad. «Supuso un gran paso adelante en el desarrollo empresarial de la cadena Galerías Primero», destacaron.

La operación para dar una nueva vida a este activo inmobiliario empieza a dar sus primeros pasos. La actuación se lleva a cabo en una codiciada ubicación de la avenida Cataluña, uno los ejes principales de la margen izquierda de Zaragoza. La artería urbana se ha revalorizado en los últimos años gracias a las reformas llevadas a cabo en el tramo de la antigua carretera nacional, siendo ahora epicentro de varias promociones de vivienda que van a disparar el número de vecinos que vive en la zona.

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La parcela, que alcanza 17.000 metros cuadrados (13.000 de ellos construidos), se encuentra en el número 115 de la citada avenida y hace esquina con el Tercer Cinturón, al que da una de sus fachadas. Enfrente se sitúa el centro de especialidades médicas Grande Covián y en otro de los lados -el que linda con la calle Alejandro Bell— el concesionario de coches Kia Autosalduba.

El proyecto ha sido encargado a Corbanges, una empresa dedicada a construcción industrial con más de 20 años de experiencia en el sector y especializada en proyectos llave en mano para todo tipo de clientes. De los trabajos de demolición se encarga la firma zaragozana Ardetec (Aragonesa de Demoliciones Técnica), también con una dilatada trayectoria en este tipo de tareas y que acaba de ser reconocida como el sello de oro a la calidad profesional por parte de un anuario industrial.

Las dos inquilinos que estrenarán los nuevos locales comerciales que levantará en este espacio son las conocidas cadenas de comida rápida Burguer King y Popeyes, ambas pertenecientes en España a Restaurant Brands International Iberia.

15 establecimientos

En el caso de Popeyes Louisiana Kitchen, otra popular franquicia de restauración especializada en pollo frito, será su quinto establecimiento. La última apertura tuvo lugar en verano en la céntrica calle Alfonso.

Las instalaciones del que fue el principal centro logístico de Galerías Primero y El Árbol llevan en desuso una larga temporada, después de que en 2015 el Grupo Día se hiciera con esta última empresa de supermercados y decidiera centralizar sus operaciones de distribución en una planta de Villanueva de Gallego. Las naves, donde todavía son visibles los rótulos verdes de las extinta cadena castellano-leonesa, han estado sin actividad desde entonces.

La reconversión del uso de estos suelos situados junto a la avenida Cataluña es posible debido a una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que se aprobó en 2022 para permitir la instalación de empresas y negocios en el polígono de Cogullada más allá de la industria.

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El objetivo era entonces revitalizar un polígono industrial que se ha quedado incrustado en la ciudad, motivo por el cual creció la demanda de alquiler de naves para usos diferentes al industrial, como gimnasios o locales de ensayo. Es más, antes de la modificación del Plan General ya existían negocios de este tipo asentados en Cogullada.

Con este cambio normativo, desde entonces, en este polígono pueden abrir desde cafeterías y restaurantes, como es el caso de Burger King y Popeyes, hasta cocinas de comida para llevar, guarderías, quioscos, farmacias, centros sanitarios y lugares para celebrar reuniones y eventos.