Se vende un hotel situado en un edificio del siglo XVI en una bonita localidad de Zaragoza

La crisis inmobiliaria que está dejando un panorama muy complicado en las grandes ciudades de España también se está dejando notar en las pequeñas ciudades del país. La falta de oferta provoca que muchos jóvenes tengan que invertir una gran parte de su sueldo en alquilar una habitación en un piso convertido en Madrid, Barcelona o Valencia. Otros jóvenes trabajadores desisten de independizarse hasta cerca de la treintena.

En el lado contrario, los inversores están intentando encontrar buenas oportunidades inmobiliarias para ampliar su parque de vivienda. Los más afortunados se han lanzado a comprar casas en pequeños pueblos convirtiéndolas en casas rurales y atrayendo hasta municipios casi despoblados a muchos turistas. Una de las zonas más atractivas de Aragón por su turismo natural y patrimonial es la Comunidad de Calatayud con el Monasterio de Piedra como punto más llamativo. Un precioso paraje natural que vuelve a abrir sus puertas este fin de semana después de haber cerrado durante más de cuatro meses por consecuencia de la terrible DANA.

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Además, Calatayud, que acaba de superar los 20.100 habitantes, es una ciudad con una riqueza cultural y turística asombrosa. Siendo la cuarta ciudad de Aragón, posee una situación geográfica privilegiada en el camino entre Zaragoza-Madrid con conexión directa en alta velocidad. Esta localidad muestra orgullosamente su huella mudéjar como la torre, el ábside y el claustro de la magnífica Colegiata de Santa María; la iglesia y torre de San Andrés; o la iglesia y torre de San Pedro de los Francos, entre otros muchos sitios.

Hotel en un edificio del siglo XVI

Por ello es un sitio en el que buscar formas de inversión siempre es buena ocasión y más si es un turismo, que nunca falla. En la actualidad se vende un bonito hotel de hasta 471 m2 situado en una de las entradas a la ciudad por Ronda de Campieles. El precio del establecimiento se sitúa en 499.000€.

Se trata de un edificio del siglo XVI que cuenta con 7 dormitorios, 7 baños y está disponible para acoger 7 estancias. Destaca las vistas al paisaje rural y, una de ellas, por su luz y el mural de pinturas tardo góticas que representan el diluvio universal. Con techos de vigas y modernizado, este hotel crea espacios únicos e ideales para disfrutar en familia.

Si recorres sus pasillos llenos de historia podrás encontrar un restaurante para 70 comensales, donde también se pueden realizar celebraciones como cumpleaños, cenas de empresa, bodas, etc.. En días de normalidad tiene licencia para montar en terraza hasta 9 mesas.

¿Por qué es un sitio ideal para invertir? Porque es un sitio céntrico, lleno de historia, situado en una ciudad con muchas cosas que contar y sitios que visitar y, un hotel como este situado a pocos minutos de todo, siempre es una buena oportunidad para algún empresario que se quiera lanzar al mundo del turismo e invertir en él.