La Tasca del Ebro, el ‘bar de pueblo’ en La Almozara con cerveza de bodega y buena comida

Desde que el 7 de abril de 2017 La Tasca del Ebro sirviera su primera caña, este bar de Zaragoza ha ido ganándose el estómago y el corazón de los vecinos del barrio de La Almozara. Concebido como un “bar de pueblo” y con una oferta gastronómica que sorprende, el local ha conseguido crear un lugar donde el trato cercano y la buena comida son sagrados.

Al frente de este establecimiento está Luis Martín, un extremeño que se lanzó a la aventura hostelera hace 8 años, tras décadas dedicado a las ventas y un fugaz paso por un bar del barrio Oliver. “Siempre tuve esa inquietud y motivación. Conocí la trastienda de lo que es un negocio de hostelería y junto a Jesica Delgado montamos La Tasca del Ebro con mucha ilusión”, explica.

El resultado es una tasca de toda la vida pero con personalidad propia, donde la gente se siente como en casa. “Por mi experiencia en ventas, sé lo importante que es el trato con la gente. Eso nos ha permitido crear una clientela fija que nos visita todos los días y fines de semana”, comenta el propietario.

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Torreznos de altura y tapas diferentes

La Tasca del Ebro no deja indiferente a nadie. Uno de sus productos estrella es su torrezno: crujiente por fuera, tierno por dentro y tan adictivo que fue finalista en 2022 del Concurso del Mejor Torrezno del Mundo que organiza el Centro Soriano de Aragón. “No nos hemos vuelto a presentar, porque para mí el mejor jurado en el cliente”, dice Luis con una sonrisa.

Sus tapas también se salen de lo habitual, como su banderilla de langostino en tempura o su capricho de Soria: un huevo relleno de picadillo con un trozo de torrezno encima. Tampoco faltan los clásicos, como las croquetas y vinagrillos, de muy alta calidad. “Compramos los mejores, sin escatimar”, recalca.

Así es La Tasca del Ebro, el 'bar de pueblo' en La Almozara con cerveza de bodega y buena comida

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Menú a lo Frank Sinatra con asados y carnes a la brasa

Además de su amplia barra a la hora del vermut, la Tasca del Ebro ofrece un menú que Luis denomina Frank Sinatra, "porque lo hago a mi manera. No trabajamos primeros y segundos porque no me gusta tener nada congelado. Servimos lo que tenemos, todo fresco, y vamos variando cada día”.

Uno de los puntos fuertes del local son sus carnes a la brasa: secreto ibérico, chuletón, presa ibérica o sus costillas de lechazo. También triunfa la paletilla de Ternasco de Aragón asada y los arroces por encargo, siempre acompañados con entrantes ibéricos, un homenaje a los orígenes extremeños que también comparte la cocinera.

Y para regar todo esto, nada mejor que su cerveza de bodega, con cinco grifos y dos tanques de 500 litros, un tipo de cerveza suave y ligera que no utiliza carbónicos. “Entra muy bien y no hincha”, detalla Luis.

Sin tele, pero con conversación

Otro aspecto que marca la diferencia en este bar de La Almozara es el ambiente. En la Tasca del Ebro no hay televisión y la cobertura es escasa. “Aquí la gente viene a comer, a disfrutar y a hablar. El éxito de la tasca es la gente que trabaja en ella [son cuatro empleados]. La idea era hacer como un bar de pueblo, donde todo el mundo que entra se siente a gusto, sin importar los problemas e ideologías. Y creo que lo hemos conseguido”, indica el propietario.

La decoración del local también tiene su historia, ya que “son zarrios que ha ido trayendo la gente” y hacen que el local sea único. El horario de La Tasca del Ebro, situada en la avenida de La Almozara número 16, es de lunes a viernes de 8 de la mañana a 4 de la tarde y de 6 de la tarde a cierre, el sábado no cierra a mediodía y el domingo solo abre por la mañana hasta las 16.00 horas. Reservas en el 624 26 65 96