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Especial 23A

Zaragoza ensancha su frontera: así ha crecido la ciudad desde que comenzó el nuevo siglo

Desde el año 2000 la capital aragonesa ha ganado cinco nuevos barrios: Parque Goya, Valdespartera, Arcosur, Parque Venecia y Rosales del Canal

Grúas trabajando en Arcosur.

Grúas trabajando en Arcosur. / JAIME GALINDO

Iván Trigo

Iván Trigo

Zaragoza

Zaragoza crece. En los últimos 25 años, la capital aragonesa ha ganado más de 80.000 vecinos, un aumento poblacional de casi un 14%, un panorama que ha obligado a extender los límites de la urbe más allá de lo que suele denominarse la ciudad consolidada. En todo este tiempo, eso sí, varios factores han influido en que esa expansión no haya sido la que se previó a principios de siglo, y es que la crisis del ladrillo que estalló en 2008 frenó muchos de los desarrollos urbanísticos planeados. Pero una cosa es verdad: Zaragoza cuenta hoy con barrios que antes de que terminara el anterior milenio eran parajes inhóspitos e inhabitados.

Así, más allá del crecimiento de los límites de los distritos consolidados, Zaragoza cuenta hoy con hasta cinco barrios nuevos que no existían antes de que Nuria Roca y Ramón García dieran la bienvenida al año 2000 desde la Puerta del Sol. Estos cinco son: Valdespartera, Rosales del Canal, Arcosur, Parque Goya y Parque Venecia.

Sin embargo, la historia y la evolución de estos barrios nuevos no ha seguido un camino en paralelo. Parque Goya se inauguró justo con el inicio del siglo. Un 20 de abril del año 2000 llegaron los primeros vecinos. En Valdespartera, sin embargo, sus habitantes tuvieron que esperar hasta 2007, cuando se entregaron las primeras llaves. Estas dos zonas se desarrollaron en los años en los que la burbuja inmobiliaria hinchó los precios de los pisos, lo que puso de manifiesto la necesidad de construir vivienda protegida. Y la VPO encontró su sitio al norte de Zaragoza en Parque Goya y al sur de Montecanal en Valdespartera.

En aquellos años, los planes de crecimiento de la ciudad estuvieron condicionados por la ambición del entonces alcalde, Juan Alberto Belloch, que proyectó una Zaragoza con un millón de habitantes. La dosis de optimismo que inyectó la Expo del 2008 propició unas expectativas que después se demostraron demasiado halagüeñas. El regidor vislumbró una urbe que se iría más allá de los límites de la carretera de Castellón, que al norte crecería entorno a la carretera de Huesca y que cerraría la orla este, más allá de Las Fuentes y San José, con otra exposición internacional (Exponabo, como se le conocía popularmente) que nunca llegó.

Los barrios

Pero los partidos que apoyaron la investidura de Belloch, CHA e IU, rebajaron las expectativas del alcalde y le impidieron desarrollar y modificar el Plan General tal y como él había previsto, lo que con el tiempo se demostró todo un acierto, puesto que el pinchazo de la burbuja inmobiliaria paralizó en seco la actividad de las grúas.

Para entonces, eso sí, Valdespartera ya estaba acabado. Desde entonces, esta zona de nueva creación es el barrio más barrio de todos los que han surgido al calor del nuevo siglo. Es el que mayor población tiene de los cinco mencionados y es el que cuenta con más equipamientos. Y como ocurriera en Parque Goya, la llegada del tranvía supuso el impulso definitivo para el desarrollo de una zona en la que ya no quedan más parcelas libres para construir pisos.

En Arcosur, sin embargo, la crisis pilló de lleno y no ha sido hasta estos últimos años cuando el trabajo de las máquinas se ha acelerado, permitiendo que ya sean unos 7.000 vecinos los que viven en este barrio, que lo que ahora pide son equipamientos, servicios y un centro de salud que la DGA pretende edificar, sí, pero al lado de los bloques de Rosales del Canal, otro barrio nuevo que, a diferencia de Arcosur, cuenta con centro cívico.

Valdespartera en el año 2006.

Valdespartera en el año 2006. / GRAN ARCHIVO ZARAGOZA ANTIGUA

Este 2025, no obstante, será clave para el crecimiento de la ciudad de Zaragoza. Pendiente está el desarrollo de Parque Venecia II, mientras Arcosur y otras zonas con suelo disponible, como Miralbueno y Valdefierro, siguen acumulando licencias y permisos para seguir levantando bloques de pisos. Así, en estos últimos 25 años se pueden separar en tres periodos diferenciados. El inicio del siglo, cuando se proyectaron nuevos barrios; la crisis, cuando los planes de crecimiento se paralizaron; y la actualidad, cuando se han retomado. 

De esta evolución da cuenta el número de licencias concedidas, cuya ubicación también ayuda a hacerse a la idea de por dónde está creciendo Zaragoza. Por zonas de desarrollo urbanístico, en 2024 se otorgaron permisos para construir 674 viviendas en Valdefierro-Oliver, otras 278 en San José y el entorno de la calle Miguel Servet; y otras 206 Vadorrey y la avenida Cataluña, otra área de expansión de la capital aragonesa que ha despertado en los últimos años al calor, también, de su reforma integral.

En el listado de licencias concedidas también destaca Arcosur, con 191 pisos, la zona del Portillo y el conocido como barrio del AVE, con 109, otra de las zonas de la ciudad que se previó como una expansión y que la crisis se llevó por delante.

Según los datos aportados por el área de Urbanismo, en lo que llevamos de siglo fue en 2006 cuando más vivienda se construyó en Zaragoza, con 8.940 en total, un pico que fue decreciendo en años posteriores hasta 2010, cuando el número no sobrepasó la barrera de las 2.000 viviendas.

El área metropolitana

Los datos más bajos fueron en 2014, con solo 525 nuevas viviendas; en 2012, con 759; y en 2020, año de la crisis del coronavirus, con 1.035. La media en los últimos doce años ha estado en una horquilla de entre 1.100 y 1500 pisos y fue en 2023 y este 2024 cuando se ha dado un salto cuantitativo hasta rozar de nuevo la barrera de las 2.000.

Pero ni el desarrollo de los distritos tradicionales de la ciudad ni el nacimiento de nuevos barrios explica del todo el crecimiento de la ciudad de Zaragoza en los últimos 25 años si no se tiene en cuenta a su área metropolitana. Y es que en el entorno de la capital aragonesa hay una serie de municipios que funcionan como entes autónomos pero cuyas interdependencias con la ciudad del Ebro los convierten casi en un barrio más. Se trata, por ejemplo, de Cuarte de Huerva, que en lo que llevamos de siglo ha pasado de tener 1.847 habitantes (dato del año 2.000) a 15.112, según las últimas cifras disponibles en el Instituto Nacional de Estadística. Otro ejemplo claro es Utebo, que cuenta hoy con 19.022 vecinos, el doble que hace 25 años.

Ahora, el reto que se ha marcado la alcaldesa es llegar a los 800.000 habitantes, una cifra más modesta que la que se puso Belloch. En 25 años podremos valorar cómo, cuánto y hacia dónde habrá crecido Zaragoza.  

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