Bribón, el bar que hereda el gran legado del Brasa y pulpo en el corazón de Zaragoza

La gran oferta gastronómica que caracteriza a la ciudad de Zaragoza se sigue renovando en busca de ampliar horizontes. Los bares de tapas, situados en el centro de la ciudad, continúan siendo el punto fuerte y cada vez la tendencia es mayor hacia decantarse por este tipo de negocio. Los productos aragoneses brillan por encima del resto en las barras de cualquier restaurante zaragozano, pero poco a poco coexisten con diferentes platos.

Típico del norte de España, el pulpo se ha abierto hueco en los negocios gastronómicos aragoneses aumentando la calidad de la comida ofrecida por los bares ubicados en el pulmón de la ciudad. Es el caso de El Bribón, el restaurante regentado por Santos Gracia que sigue el legado de Brasa y Pulpo, situado en pleno corazón del barrio Delicias, y que tiene como especialidad todo lo relacionado con este exquisito molusco.

Un inicio exitoso alejado de los focos

Abrir un negocio dedicado a la restauración en cualquier ciudad del país siempre ha sido difícil debido al alto coste del alquiler del local o la enorme competencia existente en el sector. Ante esto, muchos emprendedores deciden abrir las puertas de su establecimiento lejos de las calles céntricas como hizo Santos Gracia: "Llevaba haciendo pulpo más de 10 años, lo dejé y decidí dar un gran salto abriendo una pulpería en Zaragoza". Al ser preguntado por la razón por la que escogió una calle del barrio de Las Delicias, en la que no hay mucha afluencia de gente, para comenzar su andadura con 'Brasa y Pulpo' ha sido claro: "Teníamos el mejor pulpo de la ciudad hecho con pasión y de gran calidad, así que no nos importó la ubicación en exceso".

Debido a que el resto de la competencia no ofrece un pulpo igual de cuidado en su preparación, el negocio rápidamente adquirió gran popularidad y aún más después de ganar el premio a la mejor croqueta de Zaragoza en 2024. "Es una receta que proviene de mi madre, hecha con masa a la brasa y trozos de pulpo cocido en el mismo local", explica el dueño. Tras el galardón recibido, Santos Gracia admite que "aquello se notó y viene más gente tras ello".

La mejor croqueta se hace en las Delicias, en el Brasa y Pulpo

Una nueva apertura 2 años después

El gran éxito cosechado por el dueño del establecimiento en todo el barrio, pero también en la ciudad entera conllevó a Santos Gracia a abrir un nuevo negocio, esta vez en el núcleo de Zaragoza. "Después de que la gente me pidiese que me acercara un poco al centro, tomé la decisión de invertir con un amigo y abrimos 'El Bribón: Pulpo y Copas', un restaurante diferente a lo que había en esa zona porque ofrecemos tapas y raciones, pero también copas para disfrutar del ocio nocturno", explica Gracia.

En la capital aragonesa es complicado encontrar bares especializados en productos fuera de la comunidad autónoma, por eso toma más relevancia el hecho de encontrar espacios gastronómicos expertos en ofrecer comida de otras partes de España. "En Zaragoza nadie estaba especializado en el pulpo porque en la mayoría de bares lo tienen congelado y solo lo calientan. Nosotros disponemos de cocedero y abatidor de temperatura y la diferencia es abismal por eso a los clientes les gusta tanto y lo valoran", afirma el regente.

Sobre los mejores platos que ofrece el negocio, Santos Gracia tiene claro que "los arroces con pulpo son lo que más triunfa, sobre todo la paella de pulpo a la brasa que normalmente la damos en el bar de Las Delicias pero los fines de semana en el de la calle Cádiz".

Un futuro con sabor a pulpo

El dueño de ambos negocios dedicados al servicio de pulpo en todas sus formas, admite que su jubilación está cerca, pero quiere que los establecimientos sigan conservando el aroma a ese marisco que tanto ha gustado entre la población zaragozana. "Cuando lo deje me gustaría que el negocio siguiera la misma línea que el de ahora porque ha habido mucho esfuerzo detrás de todo lo que hemos conseguido en apenas tres años", declara Santos Gracia.

A su vez, el dueño del establecimiento, que ve de cerca su marcha, describe sus restaurantes a través de un plato: "Sin duda me quedo con el pulpo natural, si puede ser frío mejor porque ahí de verdad se marca la diferencia entre uno bien cocido y otro que no".