La 'mini Romareda' se blindará contra los "intrusos": dos contratos de 860.000 euros garantizarán su vigilancia

Habrá más de una treintena de cámaras y dos vigilantes en todo momento

Túnel de vestuarios de la 'mini Romareda', a falta de acondicionarlo.

Túnel de vestuarios de la 'mini Romareda', a falta de acondicionarlo. / Miguel Ángel Gracia

Iván Trigo

Iván Trigo

Zaragoza

La 'mini Romareda' luce ya prácticamente terminada en la explanada del Parking Norte de la Expo, pero antes de su puesta en marcha tienen que resolverse todavía algunas cuestiones sobre la gestión de este recinto que no tiene parangón en España. Entre otras cosas, queda por resolver cómo se garantizará la vigilancia de unas instalaciones que están apartadas del casco urbano de la ciudad y que pueden resultar golosas para los amigos de lo ajeno.

Para ello, la sociedad Nueva Romareda, participada por el Gobierno de Aragón, el Ayuntamiento de Zaragoza y el Real Zaragoza, acaba de licitar dos nuevos contratos con el objetivo de contar con sistemas de vigilancia en el estadio del Parking Norte. El principal tiene un valor estimado de 710.208 euros y servirá para contratar personal de seguridad, mientras que el segundo, dotado con otros 150.810 euros, permitirá instalar cámaras de vídeo y tecnología de infrarrojos contra los "intrusos".

Según consta en los pliegos de condiciones, la empresa encargada de suministrar al personal de seguridad deberá garantizarla presencia de dos vigilantes en la 'mini Romareda' en todo momento. Su labor será la de patrullar por los alrededores y el interior del estadio para evitar el allanamiento del recinto o controlar situaciones de emergencia "dentro del marco establecido". Eso cuando no haya partidos, puesto que la seguridad de los eventos deportivos va a parte y dependerá de la organización del club y de LaLiga.

La labor de estos vigilantes será, por tanto, evitar que nadie se cuele en el estadio cuando esté vacío y su ámbito de actuación llegará al límite exterior de la parcela, incluyendo por tanto las zonas de aparcamiento. Cabe recordar en este punto que la mini Romareda contará con perímetros de vallas, uno más exterior y uno interior que permitirá el acceso al recinto deportivo como tal.

El trabajo de los guardias de seguridad se completará con la colocación de cámaras y otros sistemas de videovigilancia. Para eso es el otro contrato que se ha licitado, que establece que la empresa adjudicataria deberá instalar un circuito cerrado de televisión que estará compuesto por, al menos, 34 cuatro dispositivos de vídeo.

Asimiso, la sociedad Nueva Romareda pide que se instalen "barreras de infrarrojos", dispositivos invisibles que permiten conocer si alguien ha traspasado el perímetro del estadio.

Con estos dos contratos se añaden otros 860.000 euros a la factura de la operación Romareda, que por ahora no llega todavía a los 150 millones de euros contando la construcción del nuevo estadio y con el montaje del campo de fútbol modular en el Parking Norte.

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