Zaragoza vuelve a remontarse a la Edad Media con el Mercado de las Tres Culturas

El olor a incienso, la música tradicional medieval y artilugios de hace más de 1.500 años inundan ya el corazón de la capital aragonesa. El Mercado de las Tres Culturas 2025, como cada año, llega a Zaragoza desde este viernes hasta el domingo con más de 200 actividades y cerca de 130 puestos de artesanía que aúnan las culturas cristiana, musulmana y judía que en su día convivieron en las mismas calles.

"Hay cosas que no se compran todos los días en un mercado normal. Son muy auténticas y artesanales", asegura Camelia que "cada año" este evento le parece "una maravilla". Luego trabaja, por eso se ha pasado pronto durante la mañana de este viernes porque "no se lo pierde ningún año". Y aunque el calor apriete este fin de semana, esta fiel al mercado medieval señala que, como ella, "seguramente nadie quiera perdérselo". Un poco más adelante, en el Arco del Deán, Eli ojea junto a su familia la zona de la Judería y sostiene que "está todo muy bonito y que "los cuarzos" han sido su debilidad.

Maritza es de las que "pasan y miran" por mera curiosidad, pero de las que no pierden detalle. "Yo llevo aquí dos años y he venido otras veces y me encanta, por eso vengo mañana, tarde y noche", asegura. Manuel ha venido con su mujer "como todos los años" y ha aprovechado las primeras horas para "verlo sin tanta gente y aglomeración", sobre todo "las cositas de artesanía" más que la parte que atañe al estómago. Cristina y Olga, madre e hija, por contra, "siempre" se paran "en los olores y en la comida" porque son amantes del incienso y de puestos como los del queso.

Justo en el puesto Olé al gusto se dedican a vender este producto lácteo. "Traemos quesitos de oveja, cabra, vaca y de leche de búfala", asegura Johannes. Aparte de los manchegos, extremeños y malagueños también hay quesos que proceden de todas las partes del mundo: "De Italia, Holanda, Noruega, Suiza y Alemania". La venta la espera "como todos los años: buena", aunque detalla que "cada vez los veranos son más calientes y al queso no le favorece", añade.

La talla de madera también está presente en este Mercado de las Tres Culturas y antes que por la vista ya se intuye por el ruido constante de un mazo. Aitor Maño viene desde Alicante para realizar figuras, relieves y tallados de cara al público en un "taller demostrativo y participativo de carpintería". Su pico de ventas espera que sea "más hacia la noche" por el calor. No muy lejos en el puesto Señor Castor, Mauro Bártola también se dedica a las maquetas de madera: "Ya estuvimos en navidades aquí y lo que traemos son maquetas para niños y adultos; todo tipo de figuras que se montan en casa y otras 3D". A su juicio su atractivo es "volver a algo manual", que dice, es algo que sobre todo agradecen los padres que luchan contra los pequeños enganchados a las "pantallitas".

En la plaza del Pilar, ataviado con gorro y camisón verde y amarillo se encuentra José Villar, que está frente a un puesto cuanto menos místico. "Llevo ya varios años viniendo. Trabajo los minerales, en forma natural y algunos en forma pulida, pero sobre todo trabajamos con su energía, por eso El despertar con los minerales de nombre", asegura Villar. A su parecer, aparte de la belleza, las personas que se paran buscan algo "por lo que sienten".

"Nosotros somos los únicos en España que vendemos joyería y artesanía auténtica nativa americana; de los indios Navajo, indios Hopi e indios Pueblo; todas las tribus del suroeste americano". Es María Arnaiz, una artesana que permanecerá hasta el domingo frente al ayuntamiento. En Territorio Navajo los visitantes podrán encontrar, según Arnaiz "atrapasueños, plumas y hachas pequeñitas".

Ana se ha sorprendido al pasar por el mercado central, ya que ha venido "a pasar el día" y se ha encontrado con "esto tan bonito" que le ha gustado "mucho". Justo ha llegado a tiempo para ver el desfile de bárbaros, malabaristas y juglares, que a su juicio "parecía una película". A primera hora cientos de personas ya se asomaban a ver el ambiente con abanicos y botellas de agua en mano.

Los puestos del Mercado de las Tres Culturas estarán abiertos desde las 11.00 horas hasta las 14:30 horas y por la tarde, desde las 17.00 hasta medianoche. Todo ello tiene lugar la plaza del Pilar, la trasera de La Lonja, las plazas de La Seo, San Bruno, la calle Palafox y el Arco del Deán, el Puente de Piedra y el Balcón de San Lázaro.