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Correos redirigirá a sus clientes del Portillo a otra sucursal en Zaragoza a partir de este día: "No se han preocupado por el servicio ni por los trabajadores"

El edificio será demolido como parte de las obras de reurbanización del entorno, que comenzarán en diciembre

Edificio de Correos en los suelos del Portillo, que se demolerá tras su salida obligada el próximo noviembre.

Edificio de Correos en los suelos del Portillo, que se demolerá tras su salida obligada el próximo noviembre. / RUBÉN RUIZ

Alberto Arilla

Alberto Arilla

Zaragoza

El próximo viernes 31 de octubre, Correos pondrá fin a más de medio siglo de vida recogiendo las cartas y repartiendo la correspondencia de buena parte de los zaragozanos desde el entorno de la antigua estación del Portillo. Ese día será el último en la vida útil de la sucursal, como así han hecho saber desde la entidad estatal tanto a los casi 90 empleados que se verán afectados como a los vecinos del barrio Delicias, a quienes redirigirá ya a partir del lunes 3 de noviembre a sus oficinas sitas en el número 100 de Vía Hispanidad.

De esta forma, se dará el primer paso para el adiós definitivo de este gigantesco edificio a la fotografía urbana de la capital aragonesa, donde está presente desde 1973 como un exponente del brutalismo arquitectónico. En cambio, los responsables de la reurbanización del entorno del Portillo han considerado que sus paredes no tenían encaje en el futuro parque, cuyas obras empezarán el próximo mes de diciembre y en las que Zaragoza Alta Velocidad invertirá más de 30 millones de euros.

Será la UTE (unión temporal de empresas) formada por Acciona y el grupo aragonés MLN la encargada de llevar a cabo los trabajos, que en una de sus fases incluyen la demolición de la sucursal de Correos, que pasará a la historia en 2026. El abandono de esta sucursal, la 3 de Zaragoza y que incluye las unidades de Servicios Especiales 1 y 2 y la de Reparto 1, le reportará no obstante una ganancia de 7 millones a la empresa de servicios postales, entre lo que obtendrá de parte de Adif por dejar el edificio en noviembre (2,1 millones) y los 4,4 millones que se ahorrará al no comprar o alquilar otras instalaciones, además de otros ahorros menores.

Pero los cambios no afectarán únicamente a los 90 empleados de Correos en el Portillo, ya que la entidad va a aprovechar la oportunidad para reorganizar a cerca de 140 trabajadores de su plantilla en Zaragoza. La novedad principal es la unificación de dos unidades de servicios especiales (paquetería de grandes clientes, como Amazon, y en constante crecimiento), una ubicada en El Portillo y otra en el Actur, que se trasladarán a San Juan de Mozarrifar, a un centro de tratamiento automatizado.

Críticas de los sindicatos

Una serie de propuestas que no han convencido a los sindicatos. Desde CCOO, el mayoritario, ya se mostraron muy críticos hace unos días, ya que aseguran que esta alternativa "ralentizará y aumentará los tiempos de entrega", al encontrarse su futura sede a más de 15 kilómetros del centro de Zaragoza y más de 25 del Distrito Sur. Además, habrá tres nuevos CityPaq en Anselmo Clavé, un sistema de buzones inteligentes de Correos que permite recibir, enviar y devolver paquetes en taquillas. En CCOO temen que esta reorganización acabe afectando tanto a la calidad del servicio como a la plantilla.

Otro de los protagonistas sindicales, CSIF, también ha expresado su descontento a lo largo de los últimos días. "Estamos hablando de quitar una sucursal del barrio más poblado de Zaragoza, no se han preocupado ni por el servicio ni por los trabajadores", remarca su responsable, Beatriz Pardos, quien lamenta que la entidad pública no vaya a invertir "ni un euro". "Vamos a perder tiempo, a hacer más kilómetros en moto, con el riesgo que conlleva, y a dar un servicio mucho peor", asegura.

Asimismo, desde los sindicatos también han criticado la poca disposición a negociar de Correos, ya que explican que, en su última reunión, todos (CCOO, UGT, Sindicato Libre, CSIF y CGT) votaron en contra de la propuesta, aunque la entidad ya les dejó claro que el traslado se produciría en noviembre "sí o sí". "Hemos planteado que haya una nueva oficina en Delicias, tanto por los trabajadores como por los clientes, que son quienes al final lo pagan todo", concluye Pardos.

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