Codo estrena un belén hecho a mano por sus vecinos

El espíritu navideño ya ha llegado a Codo con un belén muy especial, que rinde homenaje al pueblo y que, aunque pequeño, ha sido realizado con gran dedicación y mimo. Este proyecto, que puede visitarse en la iglesia, marca el inicio de una preciosa iniciativa en la que se planea incorporar en el futuro muchos más edificios emblemáticos de Codo.

La idea surgió tras conocer el impresionante belén inspirado en Belchite Viejo, obra de Julián Palacín, que sirvió como fuente de inspiración para este proyecto. Con el impulso de la asociación Cuatro Torres, y una pequeña subvención de la Comarca, se logró poner en marcha el taller de belenismo el pasado mes de noviembre, reuniendo cada sábado a personas de diferentes edades y creando un espacio de aprendizaje y convivencia. Es un belén de Codo hecho por codinos.

A pesar de contar con un presupuesto reducido, los participantes han trabajado incansablemente, fabricando a mano más de 3.000 tejas en arcilla y construyendo varios edificios con el máximo detalle posible. Uno de los mayores retos ha sido reproducir las fachadas, ya que el ladrillo antiguo característico de Codo requiere un gran trabajo artesanal. Sin embargo, todavía hay cosas pendientes: falta añadir iluminación, mejorar algunos acabados y seguir ampliando el conjunto con nuevos edificios.

«Es un proyecto en desarrollo, con imperfecciones, pero estamos muy contentos con lo conseguido hasta ahora», destacan los organizadores. Este belén, ahora pequeño, es el inicio de una tradición que espera crecer y completarse en los próximos años, reflejando la esencia y el patrimonio de Codo. Actualmente se puede ver el edificio de las Cuatro Esquinas, el lavadero y las escuelas.

Quienes lo visiten podrán disfrutar de este entrañable primer paso, símbolo del espíritu navideño y del orgullo por las raíces del pueblo.