El candidato del PSOE a la Alcaldía de Zaragoza, Carlos Pérez Anadón, presentó ayer, a las puertas de la antigua Azucarera, sede de Zaragoza Activa y símbolo de la gestión socialista en la ciudad y "de futuro" la lista con la que intentará ganarse la confianza de los ciudadanos en las próximas elecciones del 24 de mayo. Un equipo del que dijo sentirse "orgulloso" y que, alejado del "interés morboso" de quienes le critican por dejar fuera bastiones del mandato que ahora acaba como Carmen Dueso, está "hecha para gobernar y ser la más votada".

Ese es el objetivo, seguir al frente del consistorio apostando por una mezcla de juventud y veteranía --"la media de edad de la lista es la misma que la de Zaragoza", aseguró--, agrupando a personas de difierentes sectores sociales y económicos y, en definitiva, un grupo de su confianza que, apostilló, responde a una elección que ha sido "libre y personal".

En todo caso, Anadón apela a que esta apuesta es "la de la gente", a la que se dirigirá en campaña para que "se sienta identificada, querida, y no abrasada por la soledad". A ellos les reconoció que es consciente de que se han "cometido errores, tenido fallos y dejado demandas insatisfechas" pero que "lo que no es negable es que su avance es el que la gente quería, una ciudad moderna, europea y con buenas infraestructuras", apostilló.

Insistió en que su "programa no viene en AVE de Barcelona ni en círculos desde Madrid", apuntó. Y en que no necesita padrinos para presentarse a los vecinos, como hizo el conservador Eloy Suárez con Luisa Fernanda Rudi y Manuel Pizarro. "No venimos con el paraguas de la presidenta regional ni con comisarios políticos", dijo.