Aragón cuenta desde hoy con una ley de Caza, que ha sido aprobada en las Cortes con el ánimo "proteger, conservar, fomentar y aprovechar de forma ordenada los recursos cinegéticos, garantizando su sostenibilidad y la compatibilidad con la conservación de otros recursos y usos del medio natural".

Así se contiene en la exposición de motivos de la ley, que se tomó en consideración en diciembre, después de superar una enmienda a la totalidad de IU, y que ha sido tramitada en la Comisión de Agricultura, donde recibió 95 enmiendas parciales: una del PP, 23 del PSOE, dos del PAR, 16 de CHA y 53 de IU.

Como recoge el texto de la nueva ley de caza, ésta pretende paliar las "disfunciones" que el anterior texto legislativo ha ocasionado en la práctica deportiva cinegética.

Así, además de regular el ejercicio de la caza en Aragón "en armonía con la gestión, protección, conservación, fomento y ordenado aprovechamiento de los recursos cinegéticos y del medio natural", la ley pretende que la legislación ambiental sea "más clara, precisa y eficaz, alcanzando una mayor seguridad jurídica".

El texto legislativo, según recoge en su exposición, "simplifica determinados trámites administrativos" y elimina los mecanismos de control "que no han sido eficaces" para "constituir un recurso socioeconómico capaz de apoyar a la actividad rural con la producción de rentas y puestos de trabajo generados por la propia actividad".

Además, hace hincapié en el "fomento de las costumbres de caza propias de Aragón, que constituyen un patrimonio cultural propio".