Los Colegios Oficiales de Farmacéuticos de las tres provincias aragonesas se han personado como codemandados para apoyar al Gobierno de Aragón en el proceso abierto por la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), que ha interpuesto un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) para impugnar el decreto 93/2015 publicado el pasado mes de mayo que regula los requisitos y el procedimiento para la dispensación de los sistemas personalizados de dosificación en las oficinas de farmacia aragonesas.

El recurso, que actualmente se está tramitando en el TSJA como procedimiento ordinario, denunciaba el curso de formación exigido en el decreto para que los boticarios pudieran participar en la entrega de la medicación personalizada a los usuarios a través de un blister en el que se entrega la medicación ordenada para evitar la pérdida de adherencia al tratamiento.

El colectivo estatal esgrime que esa formación --de 20 horas-- no es necesaria ya que los farmacéuticos ya están suficientemente preparados. Pero los boticarios aragoneses defienden la legalidad del decreto. "Además, los colegios han participado de forma activa en la gestación de este decreto en defensa de los pacientes y de los farmacéuticos", esgrimieron fuentes del colegio zaragozano.

FUNDAMENTAL

"Estamos a la espera de que FEFE formalice la demanda para conocer el contenido del recurso. pero consideramos que para que los farmacéuticos aragoneses implanten este servicio con todas las garantías, es fundamental una formación acreditada, siguiendo las normas de un procedimiento normalizado de trabajo", añadieron.

El sistema (SPD) es un servicio "estandarizado, protocolizado y de calidad", apuntaron los boticarios aragoneses, que, en este sentido, apelaron a que eso implica la existencia de una metodología "consensuada de trabajo, un control exhaustivo de todo el proceso, seguimiento de los datos y una recogida y registro de las incidencias que se pudieran dar". Por lo tanto, afirman que la formación tanto teórica como práctica es un paso "imprescindible" para la seguridad y calidad que requiere el despliegue de este servicio farmacéutico.

De hecho, en Aragón más de 700 farmacéuticos ya han realizado el curso de 20 horas, lo que demuestra el "enorme interés" de los profesionales por formarse. "Y no solo en Aragón, todas las provincias donde se está implantando este servicio, desde los colegios se han realizado cursos para implantar SPD. Es decir, que salvo FEFE, tanto profesionales como las organizaciones farmacéuticas consideran que la formación es totalmente necesaria", aseveraron los aragoneses. Por ello, consideran que la regulación de un servicio profesional, "en lugar de ser una traba, es una garantía para los ciudadanos y para los farmacéuticos".