Chunta Aragonesista y la Coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos mantienen su rechazo a la construcción del embalse de Biscarrués una vez aprobada ayer la ejecución del pantano de Almudévar.

En una nota de prensa, CHA considera además "vergonzosa" la aprobación de la obra de Almudévar sin un plan de restitución como pidieron los grupos del PSOE, PP y CHA en el municipio afectado, y sin contestar a las alegaciones de los afectados.

CHA-Almudévar exige un Plan de Restitución "justo", que beneficie a todo el municipio, tanto a agricultores como al resto del vecindario, ya que, además de las afecciones al término municipal, con la inundación de la ermita de Santo Domingo, implicará una subida de la tarifa de consumo de agua, y 1.500 hectáreas dejarán de producir.

"Nos gustaría creer que el Consejo de Ministros no aprobará la ocupación de los terrenos que se van a expropiar y el gasto para la obra sin cumplir todos estos trámites, licitando a la vez un plan de restitución generoso con el territorio afectado, igual que pedimos generosidad con el pago de las expropiaciones", ha advertido el portavoz municipal de CHA en Almudévar, Juan Carlos Jiménez.

Por su parte, David Félez, coordinador del Rolde de Medio ambiente de CHA, advierte que el de Almudévar es una alternativa al proyecto de embalse de Biscarrués, "al que nos seguimos oponiendo tajantemente a la vez que rechazamos la vinculación de ambos proyectos".

En el mismo sentido se ha pronunciado la coordinadora de Biscarrués que considera una "irresponsabilidad" proponer un nuevo pantano en un río contaminado de lindano cuando la prioridad del ministerio debería ser la descontaminación total del río Gállego, con dotaciones presupuestarias inmediatas, identificar los puntos de vertido y tratarlos "de la mejor manera posible para eliminar el peligro de forma definitiva".

"Es una desfachatez llevar agua contaminada a más puestos poniendo en peligro tanto la salud de la población como los productos regados con esta agua", advierte este colectivo en otro comunicado.

La coordinadora exige además que los regantes justifiquen de forma actualizada la necesidad de estos caudales, que "suponen un gran coste económico, medioambiental y social", y cuando hay alternativas de modernización y balsas laterales más pequeñas que dan respuesta a las supuestas necesidades.

Este colectivo insiste en que el río Gállego no tiene caudales suficientes para Biscarrués, que "supondrá el fin del turismo de aventura en la Galliguera", al tiempo que invitan a los políticos y personas a informarse adecuadamente sobre esta obra el próximo sábado en la jornada del río Gállego donde habrá una charla sobre este asunto.